Los dólares de Gerard Piqué consiguieron romper con 118 años de historia. La edición de 2018 quedará grabada como la última Copa Davis tradicional, ya que el torneo más prestigioso por equipos sufrirá una mutación radical desde la próxima temporada.

La Federación Internacional de Tenis y el Grupo Kosmos, la empresa dirigida por el marcador central de Barcelona que invirtió tres mil millones de dólares por los próximos 25 años, lograron el respaldo necesario en la asamblea de agosto para modificar el formato de la ensaladera.

El Grupo Mundial tendrá desde 2019 una ronda clasificatoria en febrero y una gran final en sede única durante una sola semana. La primera edición se jugará del 18 al 24 de noviembre en la Caja Mágica de Madrid y la Argentina, en su condición de potencia, recibió una invitación especial y se salteará la primera fase.

El propio Federer y la ATP, por caso, son dos pesos pesados que se encargaron de criticar el cambio. El suizo mantiene intereses cruzados por la Laver Cup, su propio torneo; y el organismo anunció la creación de la Copa ATP desde 2020 para competir de forma directa.

Nadal, por su parte, defendió las modificaciones: “La Davis acarrea problemas que están a la vista. Los mejores jugadores ya no estaban disponibles. Apoyo el cambio porque las cosas habían dejado de funcionar; habrá que probarlo unos años o, de lo contrario, rectificar”.