Legisladores estadounidenses exigirán al hijo mayor de Donald Trump y a un colaborador del presidente en su faceta empresarial la entrega de documentos en el marco de sus investigaciones sobre el mandatario, informó ayer un parlamentario demócrata.

El presidente de la comisión Judicial de la Cámara de Representantes, de mayoría opositora, Jerry Nadler, declaró ayer a la cadena ABC que Donald Trump Jr. y Allen Weisselberg, director financiero de la Organización Trump, forman parte de los alrededor de 60 individuos y entidades que hoy recibirán ese exhorto. 

Las investigaciones apuntan a “presentar el caso ante el pueblo estadounidense en relación con la obstrucción de justicia, corrupción y abusos de poder” de los que se acusa al presidente, dijo el legislador por Nueva York ante la Cámara baja del Congreso.

“Es muy claro que el presidente obstruyó la justicia”, estimó Nadler, basándose en las reiteradas acusaciones de “caza de brujas” lanzadas por Trump contra el fiscal especial Robert Mueller, que investiga una posible connivencia entre la campaña del magnate republicano y Rusia durante las elecciones de 2016. 

También probarían esa obstrucción, señaló el diputado, el despido del director del FBI James Comey en mayo de 2017, vinculado al menos en parte al caso ruso. 

Por otro lado, el presidente fue descrito de manera muy poco elogiosa días atrás por su exabogado Michael Cohen, que lo acusó ante el Congreso de ser un “estafador” que mantiene sospechosos vínculos con Moscú.

Durante su testimonio, Cohen citó numerosos casos en los que Trump salió mal parado, como un proyecto inmobiliario en Moscú, la compra del silencio de examantes y el conocimiento previo que el magnate habría tenido de revelaciones de WikiLeaks sobre su rival en 2016 Hillary Clinton. El abogado fue mano derecha de Trump durante una década. Pero hoy Cohen es uno de los principales problemas del presidente.

“Soy un hombre inocente, perseguido por algunas personas muy malas (...) y corruptas en una caza de brujas que es ilegal y jamás debería haber sido autorizada”, tuiteó ayer Trump, que calificó a su ex abogado de “mentiroso”. 

A pesar de la avalancha de acusaciones contra el presidente, los demócratas parecen reticentes a jugar, por el momento, la carta del procedimiento de destitución del mandatario o impeachment. “La ruta hacia el ‘impeachment’ todavía es larga”, declaró Nadler.