--Me pasé toda la vida buscando a mi príncipe azul
--¿Y lo encontraste?
--Mucho mejor, encontré a mi príncipe naranja.
El diálogo corresponde a un “chiste” del dibujante Nik. El hombre de la viñeta llevaba una tarjeta naranja en la mano y la mujer un montón de bolsas. El logo de esa tarjeta de crédito, además, se replicaba en la firma del dibujante. El dibujo, además de machita, parecía una publicidad encubierta de la tarjeta, pero no era así.
“Todos los que hacemos Tarjeta Naranja queremos aclarar que no tenemos relación alguna con la publicación. Ya solicitamos vía legal que se elimina por oponerse a nuestros valores y utilizar nuestra identidad sin consentimiento alguno”, informaron desde la cuenta de la Tarjeta Naranja en las redes sociales.