A través de una pericia contable, se expusieron ayer las ganancias e inversiones en seguridad de Litoral Gas, antes y después de la explosión del edificio de calle Salta 2141. Los períodos 2012 y 2014 -un año antes y uno después del hecho que terminó con la vida de 22 personas- dan cuenta de que luego de la tragedia prácticamente "se duplicó" la inversión en materia de seguridad. Se trata de una prueba que ingresaron al juicio los querellantes por la familia Gianángelo. "Lamentablemente, tuvo que suceder la explosión para que invirtieran más en seguridad", se quejó el abogado Angelo Rossini. Un vecino que sobrevivió al 6 de agosto de 2013 fue otro de los testigos de la jornada de ayer. "Pensé que era un terremoto", dijo.

"Hubo un gran desequilibrio: las inversiones en seguridad eran alrededor de un 10 por ciento de las ganancias (antes de la tragedia), lo que da cuenta de lo mal que se hacían las cosas y cómo eso termina en lo que pasó el 6 de agosto de 2013", dijo el querellante tras la audiencia de ayer. Y detalló: "En 2012, las ganancias fueron de 17 millones de pesos, mientras que la inversión fue de 2,9 millones; y en 2014 (solo en los 9 meses peritados), después de la explosión, las ganancias fueron aproximadamente de 4 millones y la inversión de 4,5 millones. Es decir que la inversión fue superior a las ganancias. Eso demuestra claramente que con la explosión se vieron las falencias y se empezó a invertir más en seguridad", aseguró.

Los datos fueron expuestos por una de las contadoras que participó de la pericia contable que se hizo en 2015 en Litoral Gas por orden judicial. La medida buscaba saber de las inversiones en seguridad, que incluyen cuestiones como redes, servicios, medidores, válvulas, entre otras, en los últimos diez años. La profesional dio a conocer primero las ganancias: "En 2012 fue de 17 millones", dijo sobre el año anterior al hecho. En tanto, en 2013 -año de la explosión- "hubo pérdida"; mientras que en 2014 la ganancia fue de 4,1 millones de pesos. "La diferencia entre 2012 y 2014 es de unos 13 millones de pesos menos", calculó.

"Es lamentablemente que tengamos que esperar una explosión, 22 muertes

y decenas de heridos para que una empresa invierta más en seguridad".

Al hablar de las inversiones en seguridad, dijo: "En 2014 -se analizó hasta septiembre- fueron 4,5 millones de pesos de inversión en seguridad, en nueve meses". Es decir, que "se invirtió más de lo que daban las ganancias (4,1 millones) en ese período" y más que en años anteriores, cuando las ganancias fueron más elevadas.

Cuando Rossini le preguntó cuál era la diferencia entre 2012 y 2014, en materia de inversión, la profesional dijo que la misma "se duplicó", teniendo en cuenta que se tomaron nueve meses de 2014 para la pericia - eran los datos que se tenían hasta ese momento-; y se cotejó con los 12 meses de 2012. 

En comparación con años anteriores, la inversión fue mayor después de 2013. En 2010, fueron 3,2 millones de pesos; al año siguiente, 2,7 millones; y en 2012, 2,9 millones de pesos. "Es lamentablemente que tengamos que esperar una explosión, 22 muertes y decenas de heridos para que una empresa con esas ganancias invierta más en seguridad", lamentó Rossini al salir de la audiencia. 

Terremoto. Franco Jariton tiene 39 años. En 2013 vivía en el 7ª D, de Salta 2141. "Estaba durmiendo. Tenía el despertador puesto 9.10 y no me podía levantar, no me podía despertar. Sonaba el despertador y no me podía mover, lo apagaba y sonaba cada 5 minutos. Cuando fue la explosión sentí que pude respirar. Se me cayó una pared encima y ahí sentí que respiraba. No era que tenía sueño, me estaba intoxicando", dijo sobre lo que pudo elaborar después. "Salí despedido a una pared de mi habitación. Tuve la suerte de no salir al vacío porque no había paredes ya. No se veía ada por el polvillo. No sabía qué pasaba, pensé que era un terremoto", describió.