La empresa Tía Maruca, popular por sus galletitas, se suma a la larga lista de compañías con problemas provocados por la crisis económica. Los 400 trabajadores de la fábrica en San Juan aún no cobraron el aguinaldo y hace meses que perciben el sueldo con demoras. También denunciaron irregularidades en el pago de los aportes para la jubilación y las obras sociales. Esa misma planta estuvo a punto de cerrar hace dos años y fue el dueño de Tía Maruca quien entonces decidió comprársela a Pépsico para ampliar su producción y salvar los puestos de trabajo.

El Sindicato de la Alimentación de San Juan se manifestó en alerta ante la situación de los 400 empleados. Todavía no cobraron el aguinaldo, cuando el período de tolerancia es de hasta cuatro días después del 30 de junio. Además, los últimos sueldos se pagaron por fuera del plazo legal. Así lo confirmó a PáginaI12 el subsecretario de Trabajo de San Juan, Roberto Correa Esbry.

“Hay una preocupación de los trabajadores por el atraso en el pago de los sueldos de cada mes y por la falta del aguinaldo, pero no hubo despidos”, sostuvo Correa Esbry. Como en esa cartera no recibieron una denuncia formal del sindicato ni un pedido de la empresa para abrir el Procedimiento Preventivo de Crisis, desde el organismo provincial no convocaron a la firma para una audiencia. Sobre las causas de los atrasos, Correa Esbry aseguró que “la disminución de las ventas y el aumento de las materias primas los llevó a un desfasaje financiero”.

Según el registro de deudores del Banco Central, Tía Maruca tiene una deuda bancaria de 133.724 pesos. El 11,7 por ciento de ese pasivo se encuentra en situación 3, que significa “con problemas”, según la clasificación de deudor que hace el BCRA. Y casi el 4 por ciento de la deuda aparece en situación 4, que significa “con alto riesgo de insolvencia”. Además, acumula 863 cheques rechazados entre el 19 de diciembre de 2018 y el 28 de junio de 2019, por un total de 197 millones de pesos. De estos, sólo 318 fueron pagados posteriormente, es decir, un 36,9 por ciento.

Tía Maruca nació en 1998 en un contexto donde las galletiterías tradicionales desaparecían. Son los mismos dueños de marcas como Golton, Dale, Argentitas y Pindy. Además, producen galletitas, alfajores, bizcochos, pan dulce y madalenas. En marzo de 2017 la compañía compró la fábrica de San Juan que pertenecía a Dilexis, una empresa del grupo Pepsico que ya había decidido su cierre. En ese momento, el CEO de Tía Maruca, Alejandro Ripani, prometió mantener las fuentes de trabajo, invertir 8 millones de dólares para ampliar la producción y ganar nuevos mercados de exportación. Además, buscaba posicionarse como la tercera empresa del rubro detrás de Arcor y Mondelez. El derrumbe del mercado interno y el alza de costos por los tarifazos de servicios públicos y el aumento de las tasas de interés terminaron por complicar la ecuación de la empresa.

La fábrica se inauguró en junio de 2017 con la participación del gobernador de San Juan, Sergio Uñac. En ese momento, Ripani, CEO de Tía Maruca, había afirmado: “Cuando vinimos acá tuvimos la percepción, que más allá del conflicto que había, el gran capital que tiene Dilexis es la gente”.