Desde este lunes, en Mar del Plata, un jurado popular conformado por doce titulares y seis suplentes deberá resolver el femicidio de Nancy Segura, una joven de 27 años que en 2017 fue asesinada según la investigación por su pareja de una puñalada en el tórax. El proceso, que comienza con la composición del jurado y la declaración de los primeros testigos, estará conducido por la jueza Mariana Iriani, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal Nº3 marplatense.

Pedro Rafael Inglera (27), imputado del "homicidio agravado por el vínculo y por ser de una mujer cometido por un hombre mediando violencia de género", llegó al debate detenido en la Unidad 44 de Batán. Según adelantaron las fuentes judiciales, Inglera será juzgado entre el lunes y el jueves y, en caso de ser encontrado culpable, recibirá una pena de prisión perpetua.

La acusación estará a cargo del fiscal de la causa, Fernando Castro, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1.

Este juicio, aseguraron fuentes de la investigación, será el primero de Mar del Plata en utilizar la modalidad por jurados para un “femicidio consumado”. Los únicos dos antecedentes similares juzgaron casos “en grado de tentativa”.

Según la investigación, la noche del 19 de junio de 2017 Inglera atacó a Segura con un cuchillo de cocina tras una discusión ocurrida en la vivienda que ambos compartían en Playa Serena, en el sur marplatense. La joven debió ser trasladada de urgencia a una sala de salud del barrio y luego al Hospital Interzonal General de Agudos, donde falleció tres horas después.

Tras el ataque, Inglera fue detenido y declaró que la herida mortal se había producido de manera accidental, luego de que él tomara un cuchillo para ayudar a un sobrino que había pedido auxilio por una supuesta pelea entre sus padres. En ese momento, aseguró el acusado, Segura "se entrometió" y "en medio del forcejeo se produjo la puñalada que provocó” su muerte.

Pese a la declaración del acusado, distintos peritajes y testimonios aportados durante las primeras horas de la investigación reforzaron la hipótesis del homicidio. La autopsia al cuerpo de la víctima estableció que la joven presentaba, además, lesiones en el cuello producto de "compresión externa", lo que indicó que hubo "una presión ejercida momentos antes del deceso de Segura en su cuello, lo cual resulta compatible con la hipótesis fiscal de que Inglera la tomó de allí para luego propinarle la puñalada mortal".

Además, según señaló el fiscal de la causa en pedido de elevación a juicio, "surgen elementos de convicción suficientes para tener por acreditado" que Inglera y su pareja, con quien tenía una hija pequeña, mantenían "una relación de concubinato sumida en un clima de violencia".