El presunto hombre armado acusado de un intento de ataque terrorista en una mezquita en Noruega apareció ante el tribunal con los ojos morados. También se sospecha de que Philip Manshaus, de 21 años, mató a su hermanastra de 17 años antes de atacar el Centro Islámico Al-Noor en el suburbio de Oslo Baerum. 

Al parecer, Manshaus recibió esos golpes del devoto Mohamed Rafiq, quien logró quitarle el arma cuando empezaba a disparar. Manshaus sonrió durante la audiencia, no habló en la corte, pero su abogado Unni Fries dijo a los periodistas más tarde que "usará su derecho de no dar explicaciones por ahora". Tras el ataque del pasado sábado, la policía dijo que Manshaus esperaba matar y había informes que sugerían que había ingresado al edificio con al menos dos rifles y llevaba un uniforme del ejército. Cuando más tarde los agentes allanaron su casa encontraron el cuerpo de su hermanastra, de quien se sospecha que asesinó de antemano.

 El abogado del sospechoso se negó a comentar sobre las especulaciones de los medios noruegos de que Manshaus se inspiró en el ataque terrorista de la mezquita de Nueva Zelanda donde un hombre armado mató a 51 personas en marzo. La primera ministra Erna Solberg calificó el intento de ataque como un "ataque directo contra los musulmanes noruegos".