Esta mañana a las 10:36 (12:36 hora argentina) se registró una explosión en el barrio de La Macarena, en el centro de Bogotá. Según un informe preliminar, entre uniformados y civiles suman 31 las personas heridas, dos de ellas en estado crítico.

El material explosivo estaba oculto debajo de una alcantarilla y habría sido accionado con control remoto. Las cámaras de seguridad de la zona están siendo analizadas. La policía detuvo a dos presuntos involucrados en la instalación de la bomba, pero por el momento nadie se adjudicó el ataque.

Los policías heridos formaban parte de un operativo de seguridad en las inmediaciones de la plaza La Santamaría, donde esta tarde iban a celebrarse las corridas de toros. Después de la explosión, las autoridades rodearon la zona con el objetivo de verificar si hay otros artefactos explosivos.

El general Hoover Penilla, comandante de la Policía Metropolitana de la capital afirmó que se descarta alguna relación entre el atentado y el sector antitaurino que protesta por el regreso de las corridas de toros a la ciudad.

En tanto, el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, catalogó el hecho como una acción terrorista y aseguró que se están llevando adelante investigaciones para aclarar éste y otros dos ataques que han tenido lugar en esa misma ciudad en las últimas dos semanas.

Aunque inicialmente el alcalde informó de la muerte de un agente policial, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, rectificó la información y dijo que "no hay víctimas mortales".