En paralelo a la votación presidencial, los ecuatorianos eligieron entre el "Sí" o el "No" a la prohibición para los funcionarios públicos o candidatos a ocupar cargos públicos de tener bienes o capitales en paraísos fiscales, de acuerdo a un plebiscito impulsado por el presidente saliente Rafael Correa, tras el destape de las denuncias de los Panamá Papers.

"Ganamos ampliamente la consulta popular. ¡Gracias ecuatorianos!”, celebró anoche el mandatario de Alianza País, anticipando una victoria de su propuesta, que se confirmaba con el 28 por ciento de los votos escrutados: el "Sí" registraba el 54,7 por ciento superando al 45,2 por ciento del "No".

“Queremos de verdad luchar contra la corrupción, no a los paraísos fiscales o visto de otra forma sí a la consulta popular”, manifestó Correa. La propuesta llegó tras el destape de los llamados Panamá Papers, que puso al descubierto la evasión fiscal como práctica global y alcanzó a varios aspirantes a cargos de elección popular en Ecuador, mientras que en la Argentina reveló una red de cuentas offshore en las que figuraba el presidente Mauricio Macri y su familia. 

La consulta impulsada por la coalición gobernante Alianza País busca un compromiso ético de los políticos y funcionarios públicos y abrir la posibilidad de que puedan ser repatriados los recursos nacionales escondidos en paraísos fiscales. Correa se convirtió durante su mandato en el primer presidente en rubricar una carta respaldada por más de 300 economistas del mundo para demandar el fin de esta práctica. “Nos está viendo el mundo entero, Ecuador puede ser ejemplo, verán que va a ser un efecto dominó”, aseguró, según la agencia Andes.

En tanto, el escrutinio oficial sobre las elecciones presidencial había avanzado este mediodía hasta el 88,2 por ciento de los sufragios y el candidato oficialista Lenin Morena continuaba liderando la votación con el 39,1 por ciento de los votos por sobre el candidato de liberal Guillermo Lasso, que contaba con el 28,3  por ciento de los votos. De esta manera, Moreno se acerca aún más a ganar la elección en la primera vuelta, ya que en caso de alcanzar el 40 por ciento de los votos cuenta con la ventaja de 10 puntos porcentuales sobre el segundo candidato con más sufragios que exige la ley electoral ecuatoriana.   

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