Desde Santa Fe

El gobernador electo Omar Perotti y el futuro intendente de Santa Fe, Emilio Jatón, acordaron una mesa de diálogo en la búsqueda de un acuerdo político ante las urgencias de la capital de la provincia: la deuda del municipio que dejará el intendente José Corral -que según Jatón- "es superior a los 1.500 millones de pesos", la escalada de crímenes que convirtió a Santa Fe en una de las ciudades más violentas de la Argentina (y que a 30 días de la intervención de la Unidad Regional I ayer sumó 80 homicidios en lo que va del año) y la crisis alimentaria en los barrios populares. Las reuniones se realizaron a pedido de Jatón, quien también sugirió a Perotti mantenerlas en reserva para evitar expectativas públicas porque ni el propio gobernador Miguel Lifschitz conocía el asunto. Los allegados a Jatón saben que su gestión "va a depender en gran parte del acuerdo político que pueda generar con el gobierno de Perotti", computan dos activos: el intendente electo no está afiliado al Partido Socialista y tiene su propio partido local "Santa Fe puede más" y ya anuncian la primera coincidencia: un "canal de comunicación que será mucho más directo" que el que tenían Lifschitz y Corral.

Para Jatón, el otro legado de Corral es "una enorme deuda social, hay una ciudad real y una ciudad construida en el discurso de los funcionarios".

Fuentes confiables citadas por la emisora LT10, revelaron ayer que ya hubo tres "reuniones reservadas" entre Perotti y Jatón, la última a principios de octubre. La agenda que planteó el intendente electo es la "asistencia financiera" del municipio ante las cuentas en rojo que dejará Corral, un "plan de seguridad" para frenar la ola de delitos y un programa alimentario ante el avance de la pobreza.

Jatón analizó con Perotti la magnitud de la "deuda" del municipio, "los recursos para 2020" y el "problema de la inseguridad", según reveló el colega Fernando Passante. Le dijo al gobernador electo que sucederá a Corral con "las cuenta al límite" y anticipó las dificultades que tendrá para "cumplir con las prestaciones fundamentales" del gobierno de la ciudad. El eje del diálogo fue el problema económico.

A mediados de setiembre, Jatón dijo que la deuda del municipio superaba los 1.000 millones de pesos cuando Corral sostenía que no era más de 300 millones. Después, la Corriente Kirchnerista de Santa Fe le aclaró a los dos que ya al 31 de diciembre de 2018, "cuando Jatón no era intendente, pero sí concejal", la "deuda consolidada" (505 millones de pesos), la "deuda flotante" (841 millones) y las "cuentas de terceros" sumaron un rojo de 1.450 millones, que "desde entonces no paró de crecer". Así que en su último encuentro de la transición con Corral, Jatón salió "muy preocupado" y corrigió sus números: dijo que "la deuda del municipio es superior a los 1.500 millones de pesos". "Vamos a recibir una ciudad en crisis", alertó.

Pidió a Perotti un "plan de seguridad" para frenar la violencia. El gobernador electo le contestó que hasta el 10 de diciembre gobierna Lifschitz.

El otro espanto es la escalada de crímenes y violencia armada. A treinta días desde que el ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro anunció la intervención de la Unidad Regional I y designó interventor al subjefe de la Policía de la provincia, Carlos Pross, ya hubo 80 homicidios en diez meses. El último, en barrio Cabal, donde un joven de 31 años fue acribillado por dos ejecutores que se movilizaban en moto en la puerta de una carnicería. Cuando asumió Pross, eran 70 asesinatos. Jatón le pidió a Perotti un "plan de seguridad" para frenar la violencia. El gobernador electo le contestó que hasta el 10 de diciembre gobierna Lifschitz.

Para Jatón, el otro legado de Corral es "una enorme deuda social". "Los hechos desmienten el relato. Hay una ciudad real y una ciudad construida en el discurso de los funcionarios" del partido de Mauricio Macri. En "la ciudad real" computa la crisis de "pobreza" y de "violencia" en las calles. Y así como Jatón anuncia que va a recibir "una ciudad en crisis", Perotti coincide que él va a recibir una provincia en "emergencia" alimentaria. "Tener una provincia que supera la media nacional con el índice de pobreza no es un dato menor. Es Santa Fe. Es una cachetada que estemos por arriba de la media nacional en los indicadores de pobreza", dijo esta semana.

Perotti pidió a todos los sectores sociales "tomar real dimensión" del problema del hambre. "En la Argentina, uno de cada dos niños es pobre. Son nuestros niños. Habrá que trabajar mucho para garantizar la alimentación, la asistencia a clases, la asistencia en la primera infancia. Los niños son el capital real del futuro de la provincia y es lo que habrá que resguardar desde el primer día", planteó el gobernador electo.