Talleres, conferencias y conciertos, en casi veinte ciudades del país, y en forma simultánea. Una oportunidad de encuentro y formación para los que hacen música para chicos, y de disfrutarla para los chicos y familias que son su público destinatario. Organizado por el Movimiento de Música para Chicos (Momusi), con todo el esfuerzo que implican este tipo de movidas autogestivas, el Segundo Encuentro Nacional de Música y Educación abre un abanico de opciones para unos y otros. En Buenos Aires, el “gran cierre” sumará a Los Musiqueros, Vuelta Canela, Cielo Arriba, La Banda de las Corbatas, Naranja Dulce, Hugo Figueras y Palmito. Todas estas bandas y artistas actuarán hoy, a partir de las 17, en el Espacio Cultural Nuestros Hijos, de Madres de Plaza de Mayo (Av. del Libertador 8151), con una entrada contribución voluntaria. El cierre será también una apertura: el “súper concierto” dará pie, al mismo tiempo, al lanzamiento del   ciclo Crece desde el pie, que durante todo el año sostendrá en este mismo espacio de la ex Esma propuestas de música para chicos.  

Mar del Plata, Trenque Lauquen, Bahía Blanca, Rosario, Salta, Catamarca, San Juan, Córdoba, Bariloche o Villa La Angostura, son algunas de las muchas ciudades donde por estos días hay todo tipo de talleres, conciertos y actividades. En la ciudad de Buenos Aires, en la sede del ECuNHi, hoy desde bien temprano se proponen talleres como “Sonando a puro folklore” o “Los juegos musicales como recurso didáctico en el aula”, o la conferencia de Teresa Usandivaras “La energía de la música”. A diferencia del gran concierto de cierre, estas instancias para docentes ya completaron el cupo con la inscripción previa. La invitación que sigue abierta, entonces, es la del festival para el público en general, a partir de las 17 (que no se suspende por lluvia).  

La idea misma de “encuentro”, explican los organizadores, es la que guía esta movida pensada para todos aquellos que trabajan en cercanía con la infancia desde su lugar de artistas, docentes y promotores comunitarios. “Los músicos que somos parte del Momusi creemos en la importancia de poder elegir, como valor determinante en la formación. Y para poder elegir, hay que conocer, comparar y tomar las decisiones desde los propios intereses, no desde aquello que la moda de turno nos dicta”, define Julio Calvo un concepto que concierne a lo musical, pero que seguramente lo excede. “Creo que lo más valioso que se puede llevar quien asista es la certeza de que no hay un mensaje, una música, una forma de hacer para los pibes. Que las posibilidades son muchísimas, que hay tradición, calidad y profesionalismo en la música infantil argentina, y que afortunadamente trascienden los estereotipos y los mensajes recurrentes”, advierte el músico, que con Los Musiqueros lleva ya treinta años mostrando esto mismo, sobre el escenario. 

“El Momusi tiene un pie muy importante puesto en la educación, pero su esencia es la música. Música realizada, compuesta, creada, recreada, arreglada por músicos profesionales que pensamos en los niños y niñas como sujetos de derecho”, observa Sonia Brounstein, integrante de Cielo Arriba, otro grupo de trayectoria, dedicado a explorar el folklore argentino y latinoamericano. “La canción es nuestro fuerte y está pensada no desde la mera repetición de estereotipos o de modelos, o desde un lugar utilitario, sino como un disparador de historias, metáforas, mundos diversos, invisibles, disparatados, llenos de guiños cómplices y juegos, elementos fundamentales en la vida de todo niño”, marca. 

Entre los grupos más nuevos que siguen esta línea, aunque con un estilo propio, está Vuelta Canela, otro de los protagonistas del festival de hoy. Nina Lenze define eso que los junta: “Nos reúne la alegría de hacer música y arte para las familias, también el entusiasmo por crear y crecer con nuestro arte. Todos trabajamos desde un lugar de respeto y valoración a la infancia. Todos compartimos lo que nos gusta y nos mueve, lo que nos divierte y nos conmueve. Y nos sumamos a este gran movimiento que se expande cada vez más”. Desde Quilmes, viene pisando fuerte La Banda de las Corbatas. Fabián Lupica, uno de sus integrantes, se suma a esta idea: “Nos une la convicción de hacer música para chicos de un mundo real, sin estereotipos, entiendo a la niñez como una etapa formidable de la vida, llena de magia, ideas y sueños, pero nunca ajena al mundo en el cual sucede, y mucho menos enajenada por el mismo”.