Atlético de Madrid, dirigido por el argentino Diego Simeone y con un gol de su compatriota Angel Correa, derrotó 3-2 a Barcelona, que había empatado transitoriamente a través de Lionel Messi, en la segunda semifinal de la nueva Supercopa de España, que se juega en Arabia Saudita.

Atlético se puso en ventaja a través de Koke, Barcelona lo dio vuelta con goles de Messi y el francés Antoine Griezman, y el equipo de Madrid lo ganó con tantos de Alvaro Morata de penal y Correa, a cuatro minutos del final. El partido se disputó en el estadio King Abdullah de la ciudad de Yeda, ante 60 mil espectadores, y fue arbitrado por el español José Luis González González.

Atlético de Madrid jugará el domingo la final de la 36ª edición ante Real Madrid, que el miércoles superó 3-1 a Valencia en la primera semifinal. Además de no jugarse en España, la final tampoco la disputarán ni el campeón de Liga, Barcelona; ni el campeón de Copa, Valencia.

Simeone logró como entrenador el tercer triunfo con Atlético sobre Barcelona en 27 partidos, luego de las victorias por Champions League de 2014 y 2016. Además el ex volante alcanzó su décima final con Atlético de Madrid, con seis títulos: dos Europa League, dos Supercopa de Europa, una Copa del Rey y una Supercopa de España.

El equipo perdió tres finales, dos de ellas en las Champios League precisamente ante Real Madrid, en 2014 y 2016; y una Supercopa de España ante el Barcelona de Gerardo Martino, en 2013. Para la estadística, Messi -que anotó su primer tanto del año- le convirtió 31 goles en 40 partidos oficiales al Atlético de Madrid, y en la comparación con otro astro como el brasileño Pelé alcanzó 619 conquistas en el club, contra 643 que marcó el brasileño en Santos de su país.



Es la primera vez que Simeone logra vencer con su club al Barcelona en una competencia local. En Arabia Saudita, y con mucha participación polémica del sistema de arbitraje VAR, el ganador supo mantener la calma cuando perdía ante el líder de la liga española.

El primer tiempo fue parejo pero sin goles, y Atlético de Madrid se puso en ventaja a los 20 segundos de la segunda mitad, a través de Koke. Sin embargo, enseguida apareció Messi, que se metió en el área luego de trabar con dos rivales y definió de derecha al primer palo de Jan Oblak. Pocos minutos más tarde, el rosarino marcó el 2-1, pero el VAR lo anuló por una supuesta mano previa, que luego llegó gracias a un cabezazo de Antoine Griezmann.

La tecnología volvió a ser importante cuando otra vez le negó un gol a Barcelona, de Gerard Piqué, por un offside milimétrico de Arturo Vidal, que hubiese sido el 3-1. Y en los últimos diez minutos, primero Morata transformó un penal en el empate, y luego  Correa se lanzó en contragolpe para sellar la remontada del Atlético.

El delantero Correa, afirmó que la "fe" del equipo fue la clave de la victoria sobre Barcelona. "Fue un triunfo de fe", aseguró el ex San Lorenzo, autor del tanto de la victoria ante el equipo de Lionel Messi. "En la primera parte se me cayó el arquero encima pero por suerte pude seguir. Estoy muy feliz por arrancar así el año. Le dedico la victoria a nuestra gente", analizó en el contacto con la prensa.

Además, Correa apuntó a la final del domingo contra Real Madrid y anticipó: "Son partidos especiales y ojalá se nos dé como este duelo ante el Barcelona".