Los editores independientes viven en estado de feria permanente también durante las vacaciones. La tercera edición de la Feria del Libro de la Costa se realizará del viernes 17 al domingo 19 de enero en el Parador Municipal de Santa Teresita (Av. Costanera entre calle 34 y 35), del 20 al 22 de enero en San Bernardo (Av. Costanera y San Bernardo) y del 24 al 28 de enero en Mar Azul, La Zorra (Calle 35 y Punta del Este), con entrada libre y gratuita. Cuarenta editoriales autogestivas ofrecerán sus catálogos con cuentos, novelas, poesía, investigación periodística, crítica literaria, historia, antropología, filosofía, sociología, comic e infantiles. Las editoras y editores de Octubre, Las Cuarenta, Milena Caserola, Santiago Arcos, Planta, Mil Botellas, Biblos, Sudestada, Malisia, FA, Pixel, EME, Club Hem, Blatt&Ríos, Mansalva, Cuenco de plata, Caja Negra, Cactus, Bajo la Luna, Santos Locos, Alto Pogo, Conejos, Audisea, Godot y Añosluz, entre otros, estarán en los stands para hablar con lectoras y lectores que quieran desentrañar los motivos y razones por las que publican determinados textos o autores.

“Nuestra idea es promover un libro en movimiento, siendo tan protagonista el lector o lectora como el autor o la autora y el editor o editora. La única forma de defender nuestra soberanía idiomática es manteniendo la dinámica de una comunicación en constante agitación, provocando a nuestrxs lectorxs”, declaran los organizadores, que tienen programadas dos actividades en el Parador Municipal en Santa Teresita: Mar&Poesía. Lecturas Marinas, con autores del Partido de la Costa, General Lavalle y la Ciudad de Buenos Aires, en la que participarán Eliana Belén, Luciana Maxit, Leandro del Arco, Noemí Quiroga y Ana Claudia Díaz (viernes 17, a las 20 horas); y Deuda, Militancias y Feminismos, una charla en torno a la reciente publicación de la revista El ojo mocho y La razón feminista de Malena Nijensohn, con Mane Miletti, Diego Caramés, Florencia Gómez y Malena Nijensohn (sábado 18, a las 20 horas). La tercera actividad programada es en Mar Azul con la presentación de Estado de feria permanente. La experiencia de las editoriales independientes argentinas 2001-2020, compilado por Verónica Stedile Luna y Daniel Badenes (sábado 25, a las 19.30 horas).

El editor de Las Cuarenta, Néstor González, cuenta a Página/12 que empezaron el año “con un ánimo renovado”. “Nos parece auspiciosa la vuelta de quienes supieron sostener políticas de producción, protección y proyección del libro argentino. Sin demora el Plan Nacional de Lecturas y la ley del Instituto Nacional del Libro Argentino reponen el entusiasmo por el protagonismo del libro. En particular por la lectura, la producción y distribución en todo el país. Por otro lado, nos pone en alerta y vigoriza a todo el sector", plantea González. "Esta tercera edición de la Feria del Libro de la Costa nos sorprende con sus playas desbordadas. Quizá algunos sientan la necesidad de tomarse un respiro después de cuatro años aplastantes, o quizá porque las opciones para vacacionar en el exterior hoy sean inviables económicamente. Como sea, la elección predilecta del conurbano, este verano, abre sus puertas a un público nuevo, o a uno que había dejado de venir. Como siempre los editores esperamos a nuestros lectores para compartir inquietudes y placeres, sin disimular nuestra intención de contagiar, seducir a aquellos curiosos que se acercan y aun no se han perdido en los sinuosos caminos de la lectura”.

La figura del editor o la editora –al igual que la figura del crítico- tiene un “prestigio ambiguo” para Verónica Stedile Luna de la editorial platense EME. “El editor aparece como alguien importante, que toma decisiones, que elige y descarta sobre el valor de otros, pero también figura bajo la marca de quien no se realiza completamente porque no es el verdadero creador de lo que vende. Algo de eso fue mutando, tal vez como consecuencia de lo que ocurre en las artes visuales y la figura del curador. Pero lo cierto es que la Feria de la Costa, y este tipo de ferias en general, apuntan a la interpelación del editor como lector. Quien edita es principalmente un lector, una lectora, y desde ahí tiene mucho para conversar con otros lectores, en especial porque al elegir un libro eligió con qué otros libros hacerlo dialogar, en qué historias ponerlo”, explica Stedile Luna.

A Matías Reck, de Milena Caserola, le gusta provocar como editor y agitador cultural. “La agitación es a los libros lo que el marketing a las empresas de telefonía móvil. No todos los productos son iguales, ni las sensibilidades las mismas. Intentamos romper con los moldes de la comunicación contemporánea y la gestión cultural diseñada por Google que le viene bien a los que organizan eventos culturales, les hace más fácil, dinámica y eficiente la movida", subraya Reck con ironía. "Creemos que armar una feria de libros tiene su mística, sin caer en la mitificación, se necesitan libros y mesas y gente de un lado y del otro. Al encontrarse el editor o editora o los autores con los lectores se produce una charla que excede el ¿Cuánto cuesta? ¿Te puedo pagar con Mercado Pago? ¿Están sólo hoy o están siempre? Allí está la agitación, el recomendar lecturas, discutir ideas o dar una opinión sobre el final de una novela sin spoilear, convencer a alguien que no lee poesía a que lea poesía con el argumento de que la poesía contemporánea no es como la poesía de rimas que les enseñaban en la escuela, sino que puede contar una historia con otro ritmo que el cuento. Agitar es charlar sobre cómo fue traducido un texto o reconocer al artista que ilustró una tapa. Agitar es estirar el tiempo y vivir en estado de feria permanente”.