Desde distintos sectores de la oposición porteña señalaron la responsabilidad del Gobierno porteño en la muerte de Ramona Medina, no solo por la llegada tardía a ocuparse de la expansión del coronavirus en las villas, sino -y en particular- por la falta de agua en la Villa 31, que agravó la situación. Desde legisladores del Frente de Todos, de la izquierda a dirigentes de las organizaciones sociales y referentes de los derechos humanos repudiaron la muerte de la dirigente de La Poderosa.
"La falta de respuestas concretas por parte del Gobierno porteño en el marco de la pandemia se llevó, en menos de 48 horas, a dos compañerxs imprescindibles del Barrio Padre Mugica: el Oso y Ramona. La implementación de protocolos específicos en los barrios populares no puede esperar más", reclamó la legisladora del Frente de Todos Paula Penacca.
El reclamo de un protocolo forma parte de los planteos que le hizo la oposición al jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, en los encuentros que tuvieron desde el comienzo de la cuarentena. El bloque del Frente de Todos presentó varios proyectos de ley en ese sentido, pero no fueron tratados por la Legislatura, que sí tuvo tiempo para aprobar el endeudamiento de la Ciudad y la Ley de Emergencia Económica, que le permite al mandatario redirigir partidas presupuestarias.
"Murió Ramona. La referente de La Garganta Poderosa de la Villa 31. Reclamaba agua para higienizar a su familia. ¿Quién cuida ahora a sus hijas, una discapacitada y con oxígeno? Todos estan internados. Nacho Levy me decía el otro día: 'Los que vivimos en la villa nos morimos antes'. Tenía razón", reflexionó el legislador Leandro Santoro.
Por su parte, la legisladora del PTS-FIT Myriam Bregman advirtió: "Las muertes anunciadas en los barrios populares constituyen un crimen social".
Su compañera de bloque Alejandrina Barry mostró imágenes de un despliegue policial frente a la Legislatura y tuiteó: "En la legislatura Porteña el día que #Larreta
aprobó vender 12 terrenos públicos de la Villa 31 para recaudar 168 millones de dólares para pagar la deuda por el Paseo del Bajo, así recibian a los vecinos que reclamaban que no le vendan sus tierras y sus casas". Por su parte, el legislador del PO-FIT Gabriel Solano consideró que "Ramona Medina fue asesinada por un gobierno y un régimen corrupto y discriminador".
La diputada Victoria Donda se sumó al hashtag #JusticiaPorRamona propuesto por La Poderosa, que aglutinó en Twitter los reclamos por su muerte. "Que inmensa tristeza. @gargantapodero lxs abrazamos y acompañamos. Ramona era una de esas compañeras imprescindibles. Ella denunció desde el primer día la situación de los barrios populares durante la pandemia", dijo Donda. El referente de Libres del Sur Humberto Tumini planteó: "Falleció por coronavirus Ramona Medina. Firme defensora de los mas humildes y las disidencias, confrontó duramente con el gobierno de la CABA por tener al barrio 9 días sin agua en plena pandemia".
Hubo un integrante del PRO que se animó a sumarse a las condolencias: fue Daniel Lipovetsky.
"Lamento el fallecimiento de Ramona, gran referente social. Su muerte
muestra la vulnerabilidad de los barrios populares frente a la
pandemia. También es lamentable los que hacen politiquería con su
muerte. Hoy es la 31, mañana puede ser en cualquiera de los 1656
asentamientos de la provincia", contraatacó el diputado provincial.
Por otro lado, hubo una campaña de trolls en redes durante todo el lunes para ensuciar a Ramona con fake news. En la misma línea, en el programa del periodista Luis Majul en una entrevista al escritor macrista Federico Andahazi sostuvieron que con la muerte de Ramona "quieren armar un nuevo Santiago Maldonado". El hermano de Santiago, Sergio Maldonado, les respondió en Twitter: "Nadie armo nada, lacras. Háganse cargo de las muertes.
Me dan Asco. Miserables mercenarios".
Maldonado se había sumado antes a quienes responsabilizaban al Gobierno porteño por la muerte de Ramona: "La inoperancia de funcionarios y politicos mato a Ramona. Un abrazo a sus familiares y amigxs", escribió en su cuenta de Twitter.
