Queremos expresar nuestra preocupación ante la posibilidad de que las maniobras fraudulentas llevadas a cabo por el Grupo Vicentin en detrimento de la banca pública, miles de productores y trabajadores tenga como resultado una mayor concentración y extranjerización del comercio exterior de granos y de la cadena de producción alimentaria.

El avance de grupos transnacionales como Glencore, Dreyfus y Cargill, así como laaparición en escena de dirigentes asociados a etapas aciagas de nuestro país que intentan promover una mentirosa salida nacional y popular, resulta alarmante. Situación ésta que será la segura consecuencia de dejar librada la resolución al devenir de los negocios y la justicia.

Siendo evidente que el fraude consumado por Vicentin incluye el uso irregular del crédito público y la expresa comisión de delitos de evasión tributaria, fuga de divisas y lavado de activos a través de sus empresas vinculadas en Paraguay, Uruguay y Panamá, consideramos imprescindible y urgente que el gobierno tome control de la situación y, utilizando las herramientas del Estado, intervenga urgentemente sobre un concurso que está apañando un fraude, y promueva una alternativa para el futuro del Grupo Vicentin, que tome en cuenta los verdaderos intereses del país y la comunidad.

La República Argentina necesita hoy una empresa testigo en el comercio exterior de granos y en la producción de aceite y alimentos. Por eso nos parece insensato ceder una empresa estratégica como Vicentin a grupos y lobbies cuyas maniobras no garantizarán en lo más mínimo convertirla en una empresa argentina. Hay mucho dinero en juego, y el papel de la corrupción política, bancaria y empresarial que condujo a la actual situación de lo que fue el Grupo Vicentin, exige con urgencia una solución distinta, seria y transparente que ninguna de las opciones hoy vigentes podría concretar.

Vicentin es estratégica y clave para la soberanía y el control sobre la producción de alimentos. Por eso el gobierno nacional no debería permitir que la misma caiga en manos de actores que, con otro nombre, mantendrían y profundizarían el mismo comportamiento contrario a los intereses nacionales que Vicentin tuvo hasta ahora. Es por esto que los abajo firmantes, precisamente por tratarse de un bien estratégico, proponemos que el gobierno impulse los pasos necesarios para transformar a Vicentin en una empresa pública no estatal bajo control político y social.

Hacemos este pronunciamiento frente al hecho objetivo de que en el marco de la pandemia y la emergencia sanitaria, en algunos escritorios se cocinan maniobras contrarias a los intereses nacionales y populares. Para poner a la Argentina de pie necesitamos una Vicentin que sea una empresa pública testigo del comercio exterior y de la producción de alimentos.

Por todo lo anterior, solicitamos una urgente entrevista con el Presidente de la Nación.

* Este texto está firmado además por Ana Galmarini, Juan Monteverde, Claudio Lozano, Mempo Giardinelli, , Pino Solanas, Victoria Donda, Horacio González, Alcira Argumedo, Juan Grabois, Maristella Svampa, Damaris Pacchiotti, Itai Hagman, Agustina Donnet, Juan Carlos Alderete, Jorge Bernetti, Letizia Quagliaro, Víctor de Gennaro, Leonardo Grosso, Daniel Menéndez, Omar Principi (ex pte de FAA), Juan Manuel Rossi (pte de FECOFE, Federación de Cooperativas Federadas), Daniel Yofra, Ricardo Peidro, Hugo Godoy, José Conde Ramos, Bruno Capra, José Luis Migueles, Francisco "Paco" Durañona (Movimiento Arraigo), Carlos León, PedroTsakumagkos y María Isabel Tort (Cátedra Estudios Agrarios Ing.Horacio Giberti), Pedro Azcuy y Gabriela Martinez Dougnac.