El fiscal de Rawson Fernando Rivarola presentó este lunes ante el juez de Garantías Marcelo Nieto Di Biase los términos del acuerdo de juicio abreviado en la causa por la violación grupal, a la que Rivarola denominó "desahogo sexual" , perpetrada en 2012 a una adolescente de 16 años. Ahora, el juez deberá decidir si acepta el acuerdo para condenar a los tres imputados por "abuso sexual simple", con una pena de tres años de prisión en suspenso, sin aplicación efectiva. La joven participó de la audiencia y aseguró que el acuerdo "es una posibilidad de darle un cierre definitivo a este hecho para poder seguir viviendo". 

“Las partes hemos ratificado el acuerdo”, dijo Rivarola al finalizar la audiencia realizada de modo virtual en la ciudad de Rawson. Además del fiscal y el juez Nieto Di Biase, de la jornada participaron representantes de las partes acusadas y la propia víctima, quien presenció la audiencia junto a la psicóloga que la acompaña desde el año 2015.

Aunque la jornada no fue de acceso público, el área de comunicación del Ministerio Público Fiscal de la provincia de Chubut reprodujo algunas declaraciones de la joven, que brindó su autorización para que fueran publicadas. Según el comunicado del Ministerio, la víctima manifestó que "el acuerdo es aliviador". Además, sostuvo que necesita "darle un cierre definitivo al hecho para poder seguir viviendo". Por su parte, la psicóloga aseguró que para la mujer, que ahora tiene 25 años, resultó duro "ver en las redes sociales y la televisión que su caso reaparecía sin su consentimiento, revictimizándola una vez más". 

En declaraciones a Página/12, amigas de la joven, que la acompañaron durante todo el proceso, sostuvieron que "un juicio abreviado aparece como la mejor manera de obtener algo de justicia y consolidar la paz que necesita nuestra amiga". Sin embargo, se encargaron de remarcar que "es necesario exigir reformas judiciales y una justicia con perspectiva feminista, revisar las doctrinas y el léxico judicial". En este sentido, concluyeron: "Nuestra amiga nunca tuvo la posibilidad de que todos sus violadores vayan presos, las dificultades probatorias y los procesos burocráticos son muy grandes cuando la justicia tarda en llegar casi 8 años". 

Es que el hecho ocurrió en septiembre de 2012, cuando la joven tenía solo 16 años. Tras sufrir el abuso sexual del que participaron seis hombres --hijos de familias poderosas de Puerto Madryn, Trelew y Gaiman--, la víctima fue hostigada y amenazada por los responsables y se vio obligada a mudarse de la ciudad. Recién en enero de 2019, ya a sus 24 años, la mujer pudo denunciar lo sucedido a través de su cuenta de Facebook. Seis meses después se inició la investigación judicial en Rawson.

Entonces, los imputados fueron cinco, ya que el sexto hombre demostró, según argumenta el fiscal, que se encontraba en la habitación pero con otra joven. La causa fue caratulada por "abuso sexual con acceso carnal gravemente ultrajante y agravado por la participación de más de dos personas", lo que implicaba, como mínimo, 8 años de prisión. Sin embargo, en el acuerdo propuesto por el fiscal, el delito se redujo a "abuso sexual simple", con una pena de 3 años, sin aplicación efectiva. 

Al día de hoy, de los cinco imputados solo continúan en la causa Leandro Del Villar, Luciano Mallemaci y Ezequiel Quintana, quienes asumieron su responsabilidad en el marco del acuerdo. El dueño de la casa donde fue perpetrado el abuso y otro acusado fueron apartados por ser menores de edad al momento de los hechos. Ahora, a casi ocho años de la violación grupal, el juez deberá resolver si finalmente todos los responsables resultan excarcelados.