La noche del miércoles se vio inundada por los rumores que indicaban que el emblemático ex capitán de Boca y la Selección Nacional Silvio Marzolini, de grave estado de salud, había fallecido. Sin embargo, un mensaje de audio publicado por una de sus hijas desmintió tal información y confirmó que el histórico número 3, de 79 años, sigue luchando por su vida.


El nacido en el barrio porteño de Barracas se encuentra en su propio domicilio, asistido por su entorno cercano. En junio del último año, Marzolini había sufrido un accidente cerebrovascular mientras se encontraba internado en el Sanatorio Fleni.

Los familiares acompañan a Marzolini en todo momento y desde la cuenta oficial de Boca en Twitter se invitó a los hinchas y simpatizantes xeneizes a sumarse "a la cadena de oración" por el ídolo del club. "Todo Boca acompaña la lucha de Silvio Marzolini, un pedazo de la historia del club, e invita a sumarse a la cadena de oración por su salud. Fuerza Silvio", indicó el club de manera oficial.

En tanto, la hija de Marzolini, Sol, indicó a la agencia Noticias Argentinas que su padre "está delicado y la sigue peleando", y de esta manera salió al cruce de rumores que por las redes sociales se hicieron eco de una falsa noticias sobre el deceso del ex futbolista.


Marzolini es considerado como uno de los mejores marcadores laterales de la historia del fútbol argentino y le tocó compartir época con varios de los extremos derechos más destacados del deporte, tanto en la Argentina (el uruguayo Luis Cubilla, Raúl Bernao y Omar Oreste Corbatta, entre otros) como en el ámbito internacional (el brasileño Garrincha, por ejemplo).

Arrancó su carrera profesional en Ferro, para luego pasar a Boca, en donde jugó 408 partidos entre 1960 y 1972. En Boca consiguió seis títulos como jugador, tres de Primera División en 1962, 1964 y 1965, además de los Nacionales en 1969 y 1970 y la Copa Argentina 1969. En tanto, como entrenador, fue el artífice del título del Metropolitano 1981, que Boca consiguió con Diego Maradona y Miguel Angel Brindisi como figuras rutilantes.


En la Selección disputó 28 partidos y marcó un gol. Jugó dos Mundiales (fue elegido como el mejor número 3 de la Copa de 1966), sumando siete presencias mundialistas, lo que significó un record para un jugador argentino en su momento.