Con la confirmación de la vuelta a la fase de aislamiento social desde el lunes y por lo menos hasta el 11 de octubre, lo conllevaría el cierre de locales comerciales, gastronómicos y gimnasios en esos 21 días, las cámaras que representan a esos sectores expresaron su rechazo de la medida y abren un foco de conflicto para el gobierno.

Tan solo un par de horas después que el Comité Operativo de Emergencia dio a conocer la medida, los comerciantes y gastronómicos emitieron su posición oficial en la que describieron la mala situación económica en la que se encuentran y destacaron que durante este tiempo adaptaron su funcionamiento acorde a los protocolos que se fueron dictando.

“La Cámara de Comercio e Industria de la provincia de Salta manifiesta su RECHAZO al cierre de los mismos, en el convencimiento que el comercio cumple con todas las normas de protección y bioseguridad que garantizan el resguardo de los comerciantes, los empleados y los clientes y que el foco de Incremento de los contagios no se da en las micro, pequeñas y medianas empresas que conforman el tejido comercial y productivo de la provincia”, señala dicha institución en un comunicado.

Y luego señalan que “en los últimos 6 meses las ventas son en promedio el 40% de ventas normales. En 72 manzanas del microcentro hay 638 locales vacíos. Advertimos que no damos más, una eventual fase 1 generaría el cierre masivo de comercios con la pérdida de puestos laborales, ya que por ley es imposible despidos para adecuar las estructuras al volumen de ventas”.

El sector se encuentra representado en el COE a través del Consejo Económico y Social, que a la postre fue el único voto en contra a la vuelta al aislamiento, de un total de 13 integrantes que votaron.

“Cumplimos al inicio de la pandemia con el cierre y restricción de las actividades afrontando nosotros las consecuencias y obligaciones, cumplimos HOY actuando con la responsabilidad que este tiempo exige, somos conscientes que nuestra SALUD va en ello, y aportamos soluciones para evitar el colapso económico, el cese de la cadena productiva y el imperio de la paz social”, remarcaron en el documento público.

Ayer por la tarde un nutrido grupo de comerciantes se movilizó en caravana por el centro para expresar su descontento.

En tanto la Cámara Hotelera, Gastronómica y Afines de Salta, también advierten que “nuestro sector se encuentra atravesando la más importante crisis de que la historia pueda dar cuenta”, aunque reconocen que las medidas del COE “ha adoptado para cuidar la salud y la vida de cada habitante, y comprendemos que no hay valor que se halle por encima de la vida y la salud de la población”.

Pero expresan que “nuestra cámara nuclea empresas Pymes, que necesitan del ingreso diario para poder hacer frente a sus compromisos, entre ellos y principalmente, el pago de salarios, alquiler, impuestos y servicios. Los establecimientos hoteleros, en casi un 90%, desde hace 6 meses que tienen cerradas sus puertas y los establecimientos gastronómicos no pueden soportar más cierres parciales o totales”.

Finalmente remarcan que cumplieron con todos los protocolos que se dispusieron para el sector, y que por todo lo expuesto “RECHAZAMOS el cierre de nuestros establecimientos y bregamos por una convivencia inteligente de nuestra actividad económica y el virus que nos azota”.

En ambos casos no adelantaron que actitud o medidas tomarán si es que finalmente se confirma el cierre de las actividades.

Gimnasios otra vez marcharon

Otro sector que hizo sentir su reclamo fue el que agrupa a gimnasios y academias de danza, que por segunda vez en una semana hicieron una caravana de autos para pedir por la reapertura del sector.

La primera fue el miércoles y llegaron hasta las puertas del centro cívico del Grand Bourg. Los gimnasios fueron una de las actividades que más tiempo estuvieron cerradas en la primera etapa de aislamiento ya que fueron habilitados recién al tercer mes.

Luego pudieron trabajar pero con una franja horaria más corta y con la capacidad limitada para garantizar el distanciamiento. Hace tres semanas se dispuso organizar el ingreso según la terminación del DNI y finalmente una semana después se dispuso determinó el cierre de los locales, medida inicialmente aceptada sin reclamos en virtud de que sería por un tiempo breve pero que ahora parece se extenderá por lo menos hasta el final de esta nueva etapa el 11 de octubre.

El principal argumento que sostienen los dueños de los gimnasios es que la actividad no incide en la circulación de personas como si sucede por ejemplo con los bancos, y que se aplicaron correctamente todos los protocolos establecidos.

Si bien hoy se confirmará mediante una conferencia de prensa cuáles serán las actividades que se suspenderán en estas tres semanas, desde esos sectores también esperan anuncios sobre la ayuda económica se implementará para asistirlos durante el tiempo que permanezcan cerrados.