Gracias a una herramienta de control electrónico que representa un avance tecnológico en materia de fiscalización, la AFIP inició cerca de 9.000 fiscalizaciones virtuales a contribuyentes que subvaluaron inmuebles en el exterior en sus declaraciones juradas de Bienes Personales . 

Con apenas cuarenta días de funcionamiento, el "robotito de la AFIP" recaudó ingresos por más de 125 millones de pesos en impuestos adeudados. El organismo detectó un elevado nivel de respuesta de los contribuyentes, que comenzaron a rectificar sus declaraciones juradas y cumplieron la pretensión fiscal: en la primera campaña de fiscalización el porcentaje rectificado ascendió al 96 por ciento de los contribuyentes y en la segunda, con los plazos todavía no cumplidos, ya alcanzó un nivel de respuesta del 55 por ciento.

En el historial de las campañas de fiscalización llevadas a cabo por la entidad, siempre aparece algún objeto que las caricaturiza. A tono con los tiempos que corren y con esta adaptación de mecanismos de fiscalización a la vida electrónica el robotito puede ser la nueva imagen que otrora fue el sabueso, aquel perro vestido como el inspector de los dibujos animados de la pantera rosa, siempre alerta y vigilante con el objetivo de buscar a los evasores en los 90; o del menos feliz "tanquecito" durante la conducción de Ricardo Cossio en la última dictadura militar, que para aumentar la recaudación y la disciplina fiscal utilizaba la caricatura de un tanque de guerra del ejército que combatía la evasión fiscal.

Es que dado el éxito del mecanismo de fiscalización electrónica en la prueba piloto, desde la AFIP se proponen iniciar nuevas campañas de fiscalización: a los inmuebles no declarados y subdeclarados en el exterior se le sumarán en el transcurso de las próximas semanas controles de usuarios de facturas falsas y de contribuyentes que omitieron declarar los depósitos en moneda extranjera, entre otras.

"El mecanismo permite, en el marco de la pandemia de la covid-19, realizar fiscalizaciones de amplio alcance a partir de distintas fuentes de información que, en la amplia mayoría de los casos, no requieren ningún tipo de información adicional delos contribuyentes", explican desde el organismo.

Cómo funciona

El organismo otorga un plazo de quince días para responder a la notificación por subvaluación de inmuebles: si el contribuyente fiscalizado rectifica su declaración e ingresa el monto adeudado, el procedimiento se cierra. Aquellos que deciden solicitar una prórroga o realizar un descargo lo hacen de manera virtual sin necesidad de trasladarse a ninguna oficina del organismo. Si una vez transcurrido ese plazo el contribuyente no responde, la AFIP inicia el proceso de determinación de oficio, que incluye la liquidación de deuda, multa e intereses. En esta instancia el contribuyente puede pagar y cerrar la fiscalización. De lo contrario, la AFIP procede con la ejecución fiscal.

Hacia fines de septiembre el organismo que encabeza Mercedes Marcó del Pont decidió exceptuar de la feria fiscal que dispuso durante la vigencia del aislamiento social preventivo y obligatorio a una serie de procedimientos vinculados a las tareas de fiscalización: las realizadas en función de la información proporcionada por la Organización para la Cooperación y Desarrollo (OCDE) sobre cuentas de argentinos en el exterior; los procedimientos de fiscalización, sumariales y de determinación de oficio relacionados con el Régimen de Precios de Transferencia; y los controles y verificaciones no presenciales. Esta última excepción dio nacimiento al "robotito".