Las expectativas de gran parte de la comunidad artística sobre la nueva fase de distanciamiento social, preventivo y obligatorio en el AMBA eran muchas. Eran tantas, que tras conocerse la noticia de que los teatros seguirán con salas cerradas al público, la primera impresión fue la de “una gran decepción”. Al menos así lo describió Carlos Rottemberg (integrante de la Asociación Argentina de Empresarios Teatrales y Musicales), a través de su cuenta de Twitter. El empresario teatral, que participó activamente de todas las reuniones con las autoridades gubernamentales para consensuar un protocolo que permita el regreso del público a las salas advirtió: “Me parece que no se entiende el valor simbólico que podía tener la apertura de las salas ahora. Si en este momento no tenemos una señal de certeza, olvidémonos por favor de la temporada de verano porque nadie va a mover productores, salas, artistas, alquileres ni todo lo que significa movilizar temporadas a cualquier lugar del país. No se puede organizar nada con esta señal inequívoca de una actividad clausurada o prohibida”.

Hace unas semanas, con la confirmación dela vuelta de la actividad teatral en la temporada veraniega bonaerense, todo parecía indicar que el regreso del teatro presencial en CABA estaba próximo a concretarse. Sin embargo,los anuncios de las nuevas aperturas del viernes pasado no incluyeron salas salas teatrales y como consecuencia AADET emitió un duro comunicado. Para la entidad, la decisión de las autoridades porteñas de no integrar al sector entre las actividades autorizadas en el contexto de la pandemia, “afecta gravemente a la conservación del tejido cultural de nuestro país e impacta en todos los espacios vinculados al espectáculo”, señala el texto.

“Evidentemente el teatro y la música en vivo no son considerados importantes ni forman parte de la agenda política”, agrega AADET y detalla que, en paralelo, desde la asociación realizaron relevamientos de las condiciones de ventilación de los espacios socios de la institución, así como también las adecuaciones de las instalaciones paracumplir con los requisitos de seguridad y “poder avanzar con la realización de funciones de forma segura y cuidada". Y, frente a la renovada postergación de una respuesta para empresarios y trabajadores de la escena cultural, el texto de AADET concluye: “¡Solicitamos la apertura de los teatros con protocolos ya!”.

A horas de conocerse el escrito, la Asociación Argentina de Actores (AAA) se sumó al pedido y compartió su propio comunicado donde instan a las autoridades gubernamentales de cada jurisdicción a “rever la medida que mantiene paralizada la actividad teatral”. La institución remarca que desde que comenzó la cuarentena trabajaron intensamente “junto a los referentes del sector y con el Estado para elaborar y consensuar protocolos que garanticen el retorno seguro y controlado del teatro, tanto comercial como independiente”. Y de manera contundente sentencian: “Solicitamos la inmediata reapertura de la actividad teatral con protocolos sanitarios. La cultura, sus trabajadorxs, el sindicato y la Obra Social de Actores se encuentran en terapia intensiva”.

En concordancia con el reclamo, Liliana Weimer, presidenta de la Asociación Argentina del Teatro Independiente (ARTEI), explica que “la situación es muy complicada” porque hoy en día siguen sin recibir apoyo económico por parte del Gobierno de la Ciudad. Además, se pregunta cuál es el criterio por el cual algunas actividades se habilitan y otras no: “En la Ciudad de Buenos Aires está prácticamente todo abierto. Quisiera saber por qué motivo se considera que el encargado de un gimnasio puede tener más responsabilidad y conciencia social en esta coyuntura de pandemia que los trabajadores de la cultura que tienen a su cargo un espacio teatral. Lo único que sigue cerrado y sin poder trabajar son las salas teatrales. Esto produce mucha decepción y desasosiego en el sector. Hemos quedado como ultimo orejón del tarro frente a muchos lugares que están abriendo de manera libre”.

Por su parte, desde la Asociación de Profesionales de la Dirección Escénica Argentina (APDEA) esperan que“la dilación de la apertura gradual de los teatros se pueda resolver cuanto antes y que se llegue a un acuerdo entre Ciudad y Nación para que la actividad artística teatral tenga la misma oportunidad que otras actividades de retomar la labor". "No solo por la tremenda cuestión económica que padecemos, sino también desde la necesidad artística y de resistencia cultural de la comunidad”.

Todas estas definiciones tienen lugar el marco de una fuerte movilización virtual promovida por la comunidad artística para visibilizar su situación de emergencia. Hace unos días, ARTEI lanzó la campaña “Si no hay teatro, crece maleza” para visibilizar la crisis que atraviesa el sector. La movilización fue acompañada con el hashtag #TeatrosBaldíos y distintas fotos que mostraban cómo se verían las veredas porteñas sin cada uno de esos espacios culturales.

La sensación de desesperanza es general y la campaña de ARTEI es una más que se suma a las tantas promovidas por todo el sector. Hace tan sólo unas semanas, se había viralizado en las redes sociales una placa roja con el texto: “Apertura de los teatros con protocolo ¡ya! La cultura también es salud”, acompañada por el hashtag #AbranLosTeatros. Hoy esa imagen vuelve a circular. Ya llevan 8 meses sin público. Y todavía reclama “que vuelvan a abrir las salas”.