Por el estado del cadáver, no se pudo determinar quiénes y cuántos fueron los agresores
Sin ADN ajeno en el cuerpo de Micaela
Los análisis genéticos habrían probado fehacientemente la participación de Sebastián Wagner en el crimen y si tuvo o no algún cómplice. De todas maneras, a la confesión del imputado se suman otras pruebas, como el pelo de Micaela hallado en su auto.



















