Una mujer denunció ya 40 veces a su ex pareja. La primera demanda fue por haberla violentado físicamente el 18 de mayo de 2020, momento en que la denunciante aseguró que la quiso matar. Según relató, su ex esposo la sigue amenazando y hostigando y que pese a las reiteradas desobediencias judiciales y amenazas de muerte, y a los pedidos de detención del fiscal interviniente, el juez Antonio Pastrana rechazó detenerlo. El acusado es Matías Sanz Navamuel, un conocido abogado, que además tiene un cargo en la Cámara de Senadores de Salta.

La primera denuncia fue radicada tras un hecho del 18 de mayo de 2020. "Ese día intentó matarme", afirmó la víctima. La policía llegó por llamados de vecinos que la escucharon gritar. "Ese día él no quedó detenido, me apretó el cuello, me ahorcó, me pegó, yo tenía la boca partida, me tiró y arrastró por las escaleras, quedé con la cadera mal, hasta hoy tengo consecuencias. Ese día yo quedé sola, se fueron los policías, se fue la ambulancia, y él agarró y se fue con tres valijas de mi casa que después me enteré cuando fue una señora a ayudarme a levantarme", recordó.

La denunciante aseguró que hubo irregularidades desde el primer momento porque la policía no la llevó a radicar la denuncia y cuando quiso hacerlo en la comisaría tampoco le permitieron y recién lo hizo días después en compañía de una abogada, en el Polo Integral de las Mujeres.

Según el relato de la denuncia, el domingo 24 de mayo Sanz Navamuel volvió a la casa de la mujer, quien se encontraba con el hijo, para reclamarle un auto que es de ella. La mujer realizó después otra denuncia en la que dejó constancia de que el 29 de mayo, existiendo medidas cautelares, el abogado la habría llamado insistentemente. A las 23, Sanz Navamuel se presentó en el domicilio con intenciones de ingresar pero no pudo porque la mujer había cambiado la cerradura. Este hostigamiento se hizo público el año pasado pero la denunciante aseguró que no se detuvo.

“Todos los días siento que corro riesgo”, sostuvo la mujer. “Me pusieron una remera con un cuchillo clavado en el patio, entraron a la casa. El puñal tiene el nombre de él, dice Matías Sanz Navamuel", precisó. Debido a esto tuvo que colocar cámaras en su propiedad. Indicó que después le tiraron una botella contra la puerta, también con un mensaje amenazante, la cámara filmó a un hombre flaco que bajó de un vehículo. "Me amenaza de muerte y amenaza con hacerle daño a mi hijo", sostuvo la mujer. "Él manda a hacer las cosas con otras personas", indicó.

La mujer dijo que vive aterrorizada por las amenazas que recibe. Además, señaló que el hostigamiento es casi permanente mediante llamadas de su ex pareja o de otras personas, antes eran a su celular y como empezó a grabar y dejar constancia del contenido en sus denuncias, ahora las hacen al teléfono fijo de su comercio. 

La mujer dijo que otros abogados le contaron que su ex marido dice públicamente que si no levanta las denuncias le provocará daño a ella o a su hijo, a quien se refiere como "el cordero". También declaró en la causa un amigo del hijo a quien le habría manifestado similares amenazas. La denunciante también detalló que le apedrearon la casa y le llegaron a dejar un pollo trozado con el mensaje "así vas a quedar, no jodas".

"Tenemos casi 40 denuncias realizadas", especificó el abogado de la víctima, Vidal Villalba Samaniego. Indicó que hay dos causas, una radicada en el Juzgado de Garantías 3, a cargo de Antonio Pastrana, caratulada como lesiones agravadas por el vínculo y violencia de género. Y otra causa radicada en el Juzgado de Violencia Familiar y de Género, a cargo de Mónica Naranjo.

La mujer cuenta con custodia policial las 24 horas, estos policías son testigos directos de las amenazas que recibe y dejaron plasmados los distintos hechos en los informes. "Voy a abrir (el negocio) y me encuentro con la vidriera toda escupida, a eso lo hicieron varias personas (...) Se han parado al frente y me han hecho señas (de cortarle el cuello) miles de veces", ejemplicó la víctima.

El fiscal interviniente, Facundo Ríos de Los Llanos, pidió la detención de Sanz Navamuel, pero fueron rechazados por el juez Pastrana.

“Él (Sanz Navamuel) siempre decía ‘mi amigo el juez Pastrana’", sostuvo la mujer, quien añadió que por esa amistad podía anticipar la inacción de este magistrado. Contó que le solicitó una audiencia pero el juez se la negó. "Él dice que tiene mucha gente conocida. Cuando quiso matarme me dijo: 'Callate la boca y no hablés porque conozco mucha gente, muchos jueces y abogados, todos me deben favores, conozco los muertos en el placard de todos'”, relató la víctima.

"En todo el trayecto lo que vemos son medidas cautelares que agravan más la situación de la víctima. La causa no avanza en nada. En un momento la jueza Naranjo le sacó la consigna personalizada y puso la consigna fija solamente de noche. Le sacó la protección a pesar de estas cosas. Ella tiene que seguir llevando la actividad comercial que desarrolla porque de eso vive. La protección debe ser integral", planteó el abogado.

La mujer relató que ha perdido clientes por tener la consigna policial en la puerta de su comercio, ya que la gente piensa que es ella la que cometió algún delito, o desconfían. Además, graficó que la que parece una presa es ella porque perdió su libertad, debe dirigirse con la consigna a todos lados y no puede vivir tranquila ante el temor diario.

"La Justicia nuestra es tan patriarcal y tan machista que no ha cumplido la legislación nacional ni provincial respecto a la violencia de género. Yo pedí que hagan algo con él, que el peso de la protección no recaiga solo sobre ella", expresó el abogado. También advirtió que su representada está en constante peligro. Sostuvo que al denunciado "hay que detenerlo y hacerle una pericia psiquiátrica profunda y un tratamiento" para proteger a la víctima.

El letrado también hizo presentaciones cuestionando la objetividad o imparcialidad de la jueza Naranjo porque Sanz Navamuel le envió un mensaje a su ex mujer diciendo que se comunicaba por teléfono con la magistrada. Villalba Samaniego especificó que las notificaciones deben ser formales, y que una jueza no puede poner al tanto de las resoluciones al imputado de esa forma.

"Sanz Navamuel sigue hostigándola, le tira carne, le manda botellazos en la puerta, le hace llamadas telefónicas, seguimiento. La Justicia salteña nunca la contuvo", ratificó el abogado. Además, el denunciado sacó a la mujer de la obra social. El letrado consideró que el violento cuenta con privilegios.

La denunciante contó que cuando fue a Ciudad Judicial se sintió maltratada por la forma en que la interrogaban revictimizándola, "como que yo provoqué la situación", expresó.

Villalba Samaniego dijo que el fiscal pidió la remisión a juicio para Sanz Navamuel en noviembre pero la querella se opuso porque faltan pericias. “La estrategia es elevar a juicio, cerrar la etapa instructoria y coartar una cantidad de pruebas de las amenazas”, indicó.

Para ejemplificar que su ex pareja padece un trastorno, la mujer contó que a los 9 meses de haberse casado el abogado apareció en una zanja en Buenos Aires, dijo que hay un video viralizado de esto. "Mentalmente no está bien, pero no lo vuelve ininmputable y es peligroso”, aseguró Villalba Samaniego. "Él cambió desde que volvió de Buenos Aires, se volvió agresivo, me pegaba, yo no lo denunciaba, pensaba que estaba enfermo, lo acompañaba al médico", recordó ella.

Además de las causas por violencia de género y amenazas, hay una causa civil por una denuncia de la mujer contra su ex marido por estafas.

Sanz Navamuel tiene 54 años y trabaja en la Cámara de Senadores. Por esto, la Comisión de la Mujer, cuya presidenta es la senadora Silvina Abilés, citó a la víctima el año pasado. La ex esposa expuso allí un audio en el que el abogado la amenazaba e insultaba. "Abilés dijo que él está en el sexto piso, aislado, y que no hay mujer que corra riesgo a su lado. Me pareció descabellado", expresó.

La mujer detalló que en el informe que se hizo en el Senado figura que Sanz Navamuel "está en el cargo pero no cumple función. Tiene que ir pero no tiene asignación de tareas". “No es excusa que esté en planta permanente. Tienen un montón de causas para removerlo”, dijo Villalba Samaniego.

El abogado de Sanz Navamuel, Fernando Teseyra, dijo a Salta/12 que está ejerciendo la defensa pública y que ni él ni su cliente realizarán comentarios respecto a este tema.