Dos policías fueron imputados ayer por el allanamiento ilegal en el que balearon a un hombre en el rostro cuando creyó que estaban entrando ladrones a su casa, el miércoles pasado. Rafael Venialgo Acosta tenía 55 años y dormía con su pareja en la vivienda de Pasaje 1821 al 4900. Cuando escucharon ruidos, llamaron al 911 y la víctima intentó defenderse con un machete, momento en el que recibió un disparo mortal con posta de goma. La jueza María Isabel Mas Varela ordenó la prisión preventiva por 90 días para ambos.

El fiscal Adrián Spelta dijo que todo comenzó con un procedimiento por una persona armada que estaba siendo buscada, tras un llamado al 911, a unas cuadras de la casa de la víctima. "Patrullando las inmediaciones obtienen la información de que esta persona podría encontrarse en Pasaje 1821 al 4900. Al llegar ingresaron de forma ilegal, atravesaron el patio delantero y tras romper dos puertas accedieron al interior de la vivienda, allí se encontraron con la víctima, quien ante el temor de sufrir un robo los recibió con un arma blanca tipo machete para defenderse. En ese momento uno de los agentes comenzó un forcejeo con la víctima. Al ver que no se desprendía del arma blanca, le efectuó un disparo con el arma anti-tumulto hacia el rostro, a corta distancia", reza la acusación. En tanto, el otro agente "colocó falsamente en el acta que ambos habían ingresado a dicho domicilio luego de ver a dos masculinos correr hacia esa finca, en el lugar tuvieron un forcejeo con dichas personas, donde su compañero pierde el equilibrio accionándose el arma". 

El agente que efectuó el disparo, Miguel Y., fue imputado de homicidio doloso calificado, abusando de su función como policía, en concurso real con allanamiento ilegal. Y Roque M. quedó preso por encubrimiento doblemente agravado, en concurso ideal con falsificación ideológica de documento público, en grado de consumado y en carácter de autor, todo en concurso real con allanamiento ilegal.