Organismos de derechos humanos se reunieron con el embajador argentino en Paraguay, Domingo Peppo, y la directora de Derechos Humanos de la Cancillería, Cecilia Meirovich, para exigir medidas de investigación por Lilian Mariana y María Carmen Villalba, las niñas argentinas de 11 años asesinadas por la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) del ejército paraguayo en septiembre. Los organismos también manifestaron su preocupación por la desaparición de Carmen Elizabeth Oviedo, prima de las dos menores

"La desaparición de una niña de 14 años en un país vecino, en una zona militarizada, y la completa falta respuestas por parte de Paraguay es de preocupación para todo el movimiento de derechos humanos", aseguró en diálogo con Página/12 Camila Barretto Maia, coordinadora del Área Internacional del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) presente en el encuentro.

Además del CELS, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Abuelas de Plaza de Mayo, Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), APDH La Matanza, Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos (MEDH), Familiares y Compañeros de los 12 de la Santa Cruz, Fundación Memoria Histórica y Social Argentina y Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas participaron de la reunión y coincidieron en señalar que los hechos acontecidos en Paraguay "recuerdan las peores prácticas de los gobiernos autoritarios del pasado en América latina".

Las autoridades de Cancillería y de la embajada argentina en Paraguay presentes en la mesa de diálogo manifestaron la preocupación del gobierno y aseguraron estar trabajando desde se conoció la noticia del asesinato de las niñas. "La reunión fue positiva y creemos que el gobierno argentino está actuando como corresponde al exigir que se tomen medidas para la verdad y justicia por este crimen", aseguró Barreto Maia al respecto.

En el encuentro también se exigió que el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) revise la autopsia de Lilian Mariana y María Carmen. "Consideramos que ayudaría a destrabar este conflicto. Es una institución cuyo trabajo es reconocido a nivel regional por el rol que tuvo en la identificación de víctimas de las dictaduras del Cono Sur", planteó Barreto Maia desde el CELS.

Durante la reunión también se destacó la reciente declaración de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien le exigió a las autoridades de Paraguay "buscar de forma inmediata a la niña desaparecida" y al presidente Mario Abdo Benítez que "determine por qué no se realizó un examen forense completo" y se destruyeron pruebas importantes tras la muerte de las dos menores argentinas. 

Según los informes de la oficina de Bachelet, el pasado dos de septiembre Carmen Elizabeth Oviedo presenció un operativo de la FTC contra miembros del Ejército Popular Paraguayo (EPP), en la región de Yby Yaú, al norte de Asunción. En ese mismo operativo fueron asesinadas sus primas Lilian y María Carmen. Carmen, en tanto, está desaparecida desde principios de diciembre.

Apenas unas horas después de los hechos, el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, se dirigió al lugar del crimen y habló de "un operativo exitoso en contra del EPP". Luego, los medios y las autoridades locales confirmaron que las personas asesinadas eran Lilian y María Carmen, quienes vivían con su abuela en Misiones. 

"Este caso tampoco es algo aislado, sino que lo que revela es un proceso de militarización de la zona norte de Paraguay que arrancó en 2013 y ha sido muy efectivo para crear un discurso estigmatizante del movimiento campesino", manifestó Barreto Maia. Para la coordinadora del CELS, ese accionar incrementó los niveles de violencia en el campo y "generó graves violaciones a los derechos humanos como son las ejecuciones y desapariciones de esas niñas".