El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, brindó una conferencia de prensa tras la reunión que mantuvo este viernes con el presidente Alberto Fernández, en donde ratificó su decisión de que el lunes se mantenga la presencialidad de las clases, al tiempo que le solicitó al mandatario nacional "rever su posición".

En su presentación, que se demoró más de una hora, la máxima autoridad de la Ciudad de Buenos Aires resaltó que hará "todo lo posible para que los chicos puedan estar en las aulas el lunes próximo", aunque rescató el diálogo con el presidente Alberto Fernández, al que calificó como "positivo" ya que en estos momentos "tienen la responsabilidad de coordinar esfuerzos en un momento de angustia e incertidumbre".

"Lo último que hay que cerrar son las escuelas. Yo sostengo esta convicción. El aula más peligrosa es la que está vacía", reiteró, en un mensaje confuso que intenta instalar la idea de que no habrá clases, cuando el objetivo es pasar de la presencialidad a la virtualidad. 

Luego del encuentro que mantuvo con el Presidente, detalló que le llevó "todos los fundamentos de por qué es tan importante que continúen las clases presenciales" y reveló que en las próximas horas le alcanzará nuevos informes a raíz de algunas inquietudes expresadas por Fernández durante la reunión.

Sobre las dudas planteadas por el máximo mandatario nacional, como la preocupación por la llegada a la escuela o las aglomeraciones en las puertas de los establecimientos educativos, Larreta volvió a tensar la discusión al insistir con el discurso de que no existen riesgos sanitarios. 

Los números de Larreta

"Si tomamos la cantidad de gente que viaja en transporte público hoy, es igual a antes del comienzo de clases. Uno de cada tres que van a la escuela usaban el transporte público, hoy es uno de cada cuatro", subrayó.

También indicó que, si bien la mayoría viaja en colectivo, como se sumaron 20 % de unidades hay "más unidades para la misma cantidad de gente", lo que representa "menor contagio". Sin embargo, aclaró que "la gran mayoría de las familias en primaria e inicial van caminando, no usan transporte público" porque "viven a 10 cuadras a la redonda".

En relación a las aglomeraciones en las puertas de los colegios, consideró que "es más fácil y menos costoso organizar las aglomeraciones en las entradas que hacer que los chicos no vayan a las clases".

Tras contradecir todas las dudas planteadas por el Gobierno, lanzó un mensaje para Fernández:  "Espero que, ante la preocupación que manifestó, con esto pueda rever su posición. Voy a hacer lo posible para que los chicos vuelvan las clases el lunes".

En cuanto a la información aportada en el encuentro, Rodríguez Larreta informó que "las escuelas no son un lugar de mayor contagio" y relató que "de las 700 mil personas que acceden a escuelas hubo menos del 1 % de contagios, el 0,89% para ser precisos".

Además, explicó que se realizó un seguimiento de cada contagiado y sus contactos estrechos, en donde se detectó un 0,12 % de casos, y agregó: "La escuela no contagio y no hay propagación de virus".

Más ataques hacia el plan de vacunación

Por otro lado, el jefe de Gobierno porteño defendió su decisión de presentar un amparo en contra de la suspensión de clases presenciales y manifestó su voluntad de que "la Corte Suprema lo trate lo antes posible".

Hacia el final, reiteró sus críticas a la campaña de vacunación impulsada por el Gobierno nacional: "Si se hubiera vacunado lo que se dijo no tendríamos segunda ola. Se habían comprometido 20 millones de vacunas para fines de febrero y se aplicaron 7 millones".

Por último, le respondió al gobernador bonaerense Axel Kicillof por la discusión sobre la derivación de camas entre ciudad y provincia de Buenos Aires: "No tengo dudas que hay casos de gente de capital que se atienden en la provincia, la tendencia es exactamente la contraria. Históricamente un 30 % de las camas de terapia de CABA siempre han sido ocupadas por gente que viene de la Provincia. Hoy ese número se ratifica".

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