La Fiscalía General de San Isidro, que investiga la muerte de Diego Armando Maradona, imputó por homicidio con dolo eventual y citó a declaración indagatoria a los siete acusados en la causa.  Entre ellos se encuentra el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov y el psicólogo Carlos Díaz. Además, solicitó que se les prohíba la salida del país.

Esta imputación implica que, para los fiscales, quienes intervinieron sabían que su negligencia podía terminar en la muerte de Maradona. Las indagatorias con la imputación agravada comenzarán a tomarse desde el próximo 31 de mayo, y la lista de acusados se completa con los enfermeros Dahiana Madrid y Ricardo Almiron junto a su jefe Mariano Perroni; y la médica que coordinaba la internación domiciliaria para la prepaga Swiss Medical, Nancy Forlini.

Los investigadores, comandados por el fiscal general John Broyad, tomaron la decisión de cambiar la imputación de homicidio culposo a dolo eventual luego de recibir el pasado 3 de mayo las conclusiones de la junta médica donde 11 peritos oficiales aseguraron que Diego fue “echado a su suerte”, con un tratamiento "inadecuado, deficiente y temerario". Eso se expresa en los mensajes de los profesionales de la salud en los que decían “vamos a ir presos”, “puedo perder la matrícula”, “hay que emprolijar la historia clínica”, y otras frases similares.