"Quien tiene la llave de la solución es el gobierno nacional", señaló ayer el gobernador Miguel Lifschitz durante la reunión que encabezó junto a ministros, legisladores, intendentes y presidentes comunales por el conflicto en SanCor. En ese marco, el mandatario pidió, tanto a la Nación, como a las autoridades de la empresa láctea y a los dirigentes de Atilra, el gremio que nuclea a los trabajadores del sector, a "encontrar una solución acordada en el cortísimo plazo porque SanCor no da para más, no puede aguantar dos, tres, cuatro días más". Por su parte, el ministro de la Producción, Luis Contigiani, dijo que el presidente Mauricio Macri "corrió el arco cuando el acuerdo estaba cerrado, al decir que había que renegociar las condiciones laborales de toda la lechería, poniendo en punto muerto las negociaciones porque el gremio se retiró de la mesa". El funcionario agregó que SanCor "se ve desorientada porque invirtió mucho tiempo en la negociación, que le hubiera significado ganarlo para un plan B que hoy no tiene".

Acompañado por los ministros Pablo Farías (Gobierno), Julio Genesini (Trabajo), Gonzalo Saglione (Economía) y Contigiani, el gobernador Lifschitz presidió ayer el encuentro por SanCor del que participaron los senadores Felipe Michlig y Rubén Pirola, los diputados Antonio Bonfatti, Rubén Galassi, Inés Bertero, Eduardo Di Polina, Verónica Benas, Héctor Cavallero, Ariel Bermúdez, Cesira Arcando, Carlos Del Frade y Luis Rubeo, los intendentes y jefes comunales de las localidades santafesinas afectadas por el conflicto, Gonzalo Toselli (Sunchales), Mario Fissore (Gálvez), Juan Guffi (Centeno) y Daniel Martina (San Guillermo). También estuvieron el secretario de Lechería, Pedro Morini, y el de Desarrollo Territorial y Economía Social, Mauro Casella.

"Los santafesinos están siguiendo con mucha preocupación la situación de SanCor, particularmente en las comunidades donde hay plantas de la empresa, quienes están sufriendo de manera más directa", dijo Lifschitz en un alto de la reunión para atender a la prensa. "Hubo intensas negociaciones con el gobierno nacional, con las autoridades de la empresa, con Atilra, para lograr una salida que permita sostener a una empresa cooperativa con una larga historia y tradición en Santa Fe, y al mismo tiempo sostener y mantener los puestos de trabajo", agregó.

El gobernador dijo que había cierta tranquilidad en resolver el conflicto porque se había llegado "prácticamente" a un acuerdo definitivo entre las partes para lograr un salvataje financiero por parte del gobierno nacional, el gremio había decidido determinadas reestricciones al salario como contribución, y la empresa se comprometía a reestructurar, sumado a las intervenciones de las provincias afectadas para mediar e intervenir de acuerdo a las competencias.

"Cuando parecía que todo estaba cerrado, lamentablemente en los últimos días las negociaciones se cortaron y pareciera que la solución se empieza a alejar", indicó Lifschitz, quien se refirió a las gestiones realizadas con los ministros Rogelio Frigerio (Interior) y Ricardo Buryaile (Agroindustria), el gremio y las autoridades de la empresa.

"Se necesita que en este fin de semana haya al menos una señal, una acción, que marque una solución definitiva para el problema. Las condiciones están dadas, nada más hace falta una decisión política y una voluntad de las partes de sentarse a la mesa de negociación que permita salvar la situación. Los tiempos nos apremian", agregó el gobernador, mientras de fondo se escuchaban los cánticos de un grupo de trabajadores del sindicato de Camioneros, repartidores de SanCor, que decidieron cortar calle San Lorenzo, entre Moreno y Dorrego.

"Estamos haciendo un llamado nacional muy contundente para que se reaccione a tiempo", dijo Contigiani a Rosario/12 al término de la reunión. El ministro subrayó que en el tablero de negociación en Buenos Aires por el conflicto de SanCor "no se comprende, no tienen magnitud, del impacto social que está en juego, además del económico y productivo en el interior, y en este caso en la provincia de Santa Fe. Estamos hablando de 4 mil familias que dependen en forma directa de su trabajo, 22 mil puestos de trabajo indirectos, proveedores, transportistas, más de 20 comunidades que dependen de la movilidad económica".

El funcionario advirtió que la industria láctea tiende a extranjerizarse. "Hay una razón estratégica de tener una mirada política, económica, del rol de SanCor en la lechería nacional cuando está perdiendo jugadores nacionales", precisó Contigiani, para quien hay que tener en cuenta que "no se beneficien determinados sectores industriales y comerciales con la desaparición de SanCor". Según el ministro, "puede darse la autoprofecía cumplida de muchos de los que sospechan que detrás de esto hay intereses económicos en juego que no ven mal que la situación de que SanCor entre en una fase de desaparición, la pregunta es ¿a quién beneficia?".

Contigiani sostuvo que el acuerdo estaba cerrado, pero el que corrió el arco fue el presidente Macri cuando plantea renegociar las condiciones laborales de toda la lechería: "Ahí se traban las negociaciones. Hacía tres meses que SanCor estaba trabajando con funcionarios de los ministerios de Trabajo y Agroindustria nacional para llegar a un plan de reestructuración, hecho por profesionales de distintas áreas que tenía varios capítulos. El presidente tiene que entender que tenemos que ir a una nueva lechería, pero con SanCor adentro".

El ministro fue más allá al señalar: "Me gustaría que ponga el mismo énfasis, como pone en las condiciones del trabajador lácteo, con el sector comercial, no habla de eso. Por qué no ponen atención en las seis grandes comerciales que remarcan el 500 por ciento en todos los productos lácteos en góndolas, de la relación desigual de las grandes industrias con los tamberos. Por qué no asumieron un plan de salvataje como hicieron con los mineros y petroleros".

El diputado Rubeo también cargó contra los funcionarios del gobierno nacional que participaron de las negociaciones por el conflicto del gigante lácteo. El legislador pidió el alejamiento de Gustavo Lopetegui, que se encargó de las negociaciones por SanCor, pero que también es dueño de Pampa Cheese, una láctea ubicada en Progreso, departamento Las Colonias. "No puede estar de los dos lados del mostrador", planteó Rubeo antes de ir al encuentro en Gobernación.