Nueve policías bonaerenses fueron detenidos acusados de asfixiar y matar a golpes a un hombre de 35 años en una comisaría de San Clemente del Tuyú, en el partido de la Costa. Inicialmente, los policías involucrados aseguraron que se había tratado de una muerte por causas naturales, pero la autopsia estableció que la víctima había fallecido como consecuencia de "asfixia por sofocación", luego de recibir varios golpes.
Los hechos ocurrieron el jueves a la madrugada, cuando el hombre, identificado por la Justicia como Alejandro Martínez, fue aprehendido por "provocar daños" en el Gran Hotel Fontainebleau, ubicado en Calle 3 y avenida Costanera de San Clemente. A poco de arribar a la comisaría 3ra. de San Clemente del Tuyú, detallaron fuentes del caso, el hombre falleció.
En la comisaría, el fiscal Pablo Gamaleri, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 descentralizada de La Costa, dispuso el traslado del cadáver a la morgue judicial de Lomas de Zamora. Horas después, el informe preliminar de autopsia determinó que Martínez había fallecido como consecuencia de una "asfixia por sofocación" tras recibir numerosos golpes en distintas partes del cuerpo.
Según testificó un hombre detenido en la misma comisaría, Martínez habría estado "un poco exaltado" al ser llevado al lugar, tras lo cual algunos policías comenzaron a apretarlo contra el piso. La empleada del hotel donde detuvieron a Martínez, en tanto, dijo al canal C5N que "el pasajero ingresó el miércoles sin problemas y en la madrugada recibimos la denuncia de los ruidos raros, apretamos el botón antipánico y vino la Policía".
Martínez "rompió algunas cosas materiales de la habitación, fue una situación fea pero todo estaba bajo control. Se lo llevó la policía y después de eso no lo volví a ver. Decía que alguien lo perseguía, que se estaba defendiendo, pero a nosotras nunca nos hizo nada, se lo veía asustado", relató la mujer.
Tras la recolección de pruebas, el fiscal Gamaleri dispuso once allanamientos y la aprehensión de nueve policías bonaerenses. Contra algunos de ellos pesa de momento la imputación de “homicidio agravado por ser cometido por un miembro integrante de la fuerza policial abusando de su función”, mientras que otros deberán hacerlo en calidad de encubridores.
"El Estado es responsable"
El Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) denunció lo ocurrido y advirtió que "el Estado es responsable de las personas que detiene".
"El descuido por la vida y la violencia contra lxs detenidxs es una constante de la Policía Bonaerense", resaltó el organismo. "Los policías armaron una versión coincidente para hacerla pasar como muerte natural" pero luego, en la autopsia, "se descubrió que lo habían matado", lo que resulta un nuevo caso de policías "armando versiones falsas ante hechos de violencia", señaló.
"Las detenciones en calabozos por contravenciones están naturalizadas pero tienen que ser discutidas", ya que "muchas veces son situaciones arbitrarias o que requieren una intervención estatal no violenta", advirtió el comunicado.
