La comisión de la cámara de representantes que investiga el asalto al Capitolio protagonizado por seguidores del expresidente Donald Trump aprobó de forma unánime la recomendación de cargos penales por desacato contra Mark Meadows, jefe de Gabinete del exmandatario republicano. Tras la decisión en diputados, el gobierno de la ciudad de Washington DC presentó una demanda contra dos grupos de derecha por su participación en el ataque.

Desacato

"El hecho de que Meadows no compareciera para prestar declaración (...), después de que se le diera una segunda oportunidad para cooperar con la comisión, constituye un incumplimiento intencional de la citación", señaló anoche la comisión en un comunicado.  Al cierre de esta edición el resultado de la votación no estaba disponible, aunque se espera que el pleno de la cámara de representantes, con mayoría Demócrata, vote para declarar a Meadows en desacato al Congreso.

De ser declarado culpable en un eventual juicio, Meadows podría ser condenado hasta un año en prisión y con una multa de hasta 100 mil dólares, indicó el matutino The Washington Post.

Demanda contra Proud Boys y Oath Keepers

En tanto, el fiscal general del Distrito de Columbia, Karl Racine, anunció este martes una demanda contra los grupos ultraderechistas Proud Boys y Oath Keepers por el asalto, en enero pasado, al Capitolio de EE.UU., en el que 5 personas murieron y cerca de 140 agentes fueron agredidos.

Según Racine, el objetivo de la demanda es "desalentar futuros actos de violencia", así como compensar a las víctimas, entre ellas dos policías de la capital estadounidense. De acuerdo con la denuncia de la fiscalía,  "el atentado del 6 de enero fue un acto coordinado de terrorismo interno". En este sentido, la ciudad de Washington se vio obligada "a afrontar las consecuencias" del ataque. La acción busca que los responsables rindan cuentas por los daños "físicos y financieros" al Distrito de Columbia.

"Voy a demandar a los Proud Boys y a los Oath Keepers, la primera demanda civil de una entidad gubernamental contra los insurrectos del 6 de enero" afirmó Racine en su cuenta de Twitter. "Causaron un gran daño al Distrito, a nuestra democracia", añadió el fiscal.

El texto de la demanda tiene como base una ley que data de 1871 y que fue promulgada para proteger los derechos de la población afroestadounidense de grupos extremistas como el Ku Klux Klan tras la abolición de la esclavitud en 1865.