Desde Lima

El Congreso controlado por la derecha ha promulgando una ley que bloquea la posibilidad de un referéndum para cambiar la Constitución neoliberal heredada de la dictadura fujimorista, cambio que es una de las principales banderas del presidente Pedro Castillo y de los sectores progresistas en su conjunto. La norma, aprobada con 72 votos de los 130 legisladores, establece que para convocar un referéndum para cambiar la Constitución se necesita la aprobación de la mayoría del Congreso, donde la derecha tiene los voto para impedirlo. Esto cierra la puerta para un referéndum convocado con las firmas del diez por ciento del padrón electoral, 2,5 millones de firmas, que era a lo que apostaba el gobierno. 

Una ley que revela el temor de la derecha a una consulta popular que decida si se debe convocar una Asamblea Constituyente para cambiar la Constitución de Fujimori. El gobierno ha reaccionado con indignación y ha anunciado que recurrirá al Tribunal Constitucional (TC) para pedir la derogatoria de esta ley por ser inconstitucional. En el TC se necesitan cinco votos de seis, lo que por la composición del tribunal se estima poco probable.

“El Congreso con el objetivo de atentar contra la voluntad popular obtuvo una ley que mutila el derecho al referéndum y que reclama una Asamblea Constituyente. Como gobierno recurriremos al TC en vista de que esta ley es antidemocrática e inconstitucional. No permitiremos que se vulnere la participación política de los peruanos, menospreciando, condicionando y sometiendo su voluntad a merced del parecer único del Congreso. Este atentado contra la población que ha exigido por años el cambio de una Constitución concebida en la dictadura, olvida que el poder del Estado emana del pueblo y se debe a su representatividad. Recae en los ciudadanos el derecho de apostar por su propio bienestar”, ha dicho Castillo.