Carlos Maslatón es un antiguo dirigente ultraliberal que, apenas se conoció el acuerdo con el FMI, conmovió a las redes sociales con su opinión publicada en la red social Twitter, que inmediatamente se convirtió en viral. "Como siempre ha sucedido en la Argentina. Los gobiernos no-peronistas contraen deuda pública en el exterior y nos someten a la dependencia. Se van del poder cuando no pueden renovarla y dejan un tendal. Luego los gobiernos peronistas vienen a arreglar el desastre que dejaron", decía el tuit que generó una enorme polémica.

En los últimos tiempos, Maslatón volvió a ser noticia por su entusiasta respaldo a Javier Milei. Tan entusiasta que fue elegido como el orador que abrió el acto con que el candidato autodenominado "libertario" festejó su resultado electoral. Muy seguido en Twitter, el comentario de Maslatón generó sorpresa, y malestar, en buena parte de sus lectores. Pero el analista de mercado respondió sin cambiar su punto de vista: "La verdad financiera ante todo, soy del mercado y no me la contaron. No voy a aceptar ninguna tergiversación de la historia por intereses políticos."

Quién es Carlos Maslatón

"Liberal manchesteriano de derecha, vanguardia del anticomunismo. Abogado. Analista técnico de mercados financieros. Bitcoinero. Soy el capitalismo", se autodefine el economista en su cuenta de Twitter, que tiene 170 mil seguidores.

Fue fundador de UPAU a principios de los 80, la rama estudiantil liberal que puso en jaque por derecha al dominio universitario de la radical Franja Morada. Los Alsogaray lo convocaron a sumarse a la UCeDé, la bandera bajo la cual empezó su carrera política como concejal porteño en 1988.

Los Alsogaray, padre e hija, se sumaron entusiastas al menemismo (hay quienes opinan que Carlos Menem se sumó entusiata al liberalismo), pero el romance de Maslatón con la política llegó a su fin en 1997, cuando Domingo Cavallo, al que seguía, aceptó en sus listas a peronistas como Gustavo Béliz. 

Desde entonces comenzó su carrera de analista financiero con tan buena fortuna que trabajó en Patagon, la primera financiera online de América latina, hasta que el Banco Santander la compró en 760 millones de dólares. Esa suma fue para el fundador del sitio, Wenceslao Casares, pero frente al intento del Banco de despedirlo, Maslatón consiguió una indemnización multimillonaria con la que inició su carrera como financista, donde ahora se lo conoce como "El rey del bitcoin".

Antes de apoyar a Milei, apareció seguido en los medios como una de las caras públicas del negacionismo frente a la pandemia de coronavirus. Llamó a no respetar las medidas de cuidado y bautizó al gobierno de Alberto Fernández de "dictadura maoista".

Su visión del acuerdo con el FMI y el futuro de Argentina

Desde hace unos meses, su respaldo al candidato ultraliberal y ultraconservador no le impidió difundir una visión optimista sobre el futuro de la economía argentina. En diferentes programas de televisión repitió que el país había tocado fondo y que se está viviendo una fuerte recuperación que se transformará en un crecimiento sostenido. 

Critica al gobierno por los controles cambiarios y las retenciones, pero es tan optimista que opina que la recuperación seguirá su curso aunque no se tomen las medidas que él impulsa. Este mismo viernes, después de conmover a los opositores con su análisis "properonista" del acuerdo con el FMI, interpeló en otro tuit al propio Presidente para que cambie sus políticas. "Está usted viendo la voladura de la soja, el trigo, el maíz y el petroleo? Argentina no puede perderse esta fiesta que recién empieza. Libere cambios, baje retenciones, la plata que entrará le permitirá cumplir bien con la deuda, cerrar déficits y bajar la miseria", le dijo a Alberto Fernández.

Lejos de conmoverse con las respuestas indignadas que le dedicaron desde la oposición, Maslatón insistió con su festejo del acuerdo. "Viva la Confederación Argentina! Vivan las Provincias Unidas del Río de la Plata! Viva la República Argentina! Celebremos, bailemos y cantemos por este nuevo y gran ciclo bullish que nos espera. Triunfa la libertad!", celebró con la imagen del escudo nacional. (En este punto conviene aclarar que "gran ciclo bullish" se traduce como "gran ciclo alcista".)

Enseguida agregó que "Como siempre lo he manifestado, reitero al Foro que estoy y estaré eternamente alineado con los intereses objetivos de la Confederación Argentina, con el triunfo de las armas argentinas y con suceso del deporte argentino sin excepciones, con irrelevancia del gobierno de turno", por si alguien ponía en duda su lejanía de Alberto Fernández.

Y concluyó, para no dejar dudas: "Las tres grandes oleadas de endeudamiento y subsiguiente crash financiero argentino fueron: 1) 1976-1981 el Proceso Militar; 2) 1986-1988 Alfonsín; 3) 2016-2018 Macri. Todos una manga de irresponsables jugadores de mesa de dinero con plata ajena. Chorros y corruptos."

Los que lo conocen, tanto amigos como enemigos, seguramente no se sorprendieron por su optimismo ni por la forma de hacerlo público. Todos saben que, como dijo en una reciente entrevista que Juan Luis González publicó en Anfibia, a Maslatón no le gusta pasar desapercibido:

—Es que yo me pongo mal si lo que hago o digo no cae mal, no jode. Necesito tener enemigos, lo vivo como una necesidad. Para que te des una idea, yo necesito que al menos un tercio de mis seguidores me repudie completamente.