• Defendamos La Plata acaba de premiar a tres vecinos por sus fotos, presentadas en el reciente concurso que organizó la ONG. Es una manera de expresar el cariño por el patrimonio propio y, por experiencia, una buena manera de validar eso de pasear por la ciudad de uno mirando en detalle, descubriendo y documentando. Así se aprenden las buenas ciudades, de a pie y con el ojo concentrado. Los resultados del concurso y las imágenes recogidas pueden verse en defendamoslaplata.blogspot.com.
  • Los vecinos del lindo pasaje Anasagasti, ese que va de Santa Fe a Güemes, están alarmadísimos porque el gobierno porteño anda flotando la idea de hacerlo peatonal. Este desmadre de peatonales, que el larretismo confunde con lo último de la gestión urbana, pasará a la historia como las esquinotas bobas del ex ministro Daniel Chaín, que se pensaba como el Haussman porteño: una tontera pasajera. El Anasagasti es un milagrito de nuestra ciudad, un pasaje de apenas una cuadra en una zona antaño residencial y tranquila, que se pobló de casas muy lindas y de buena factura, y de pequeños edificios. Ahí estaba la redacción de Novosti, la agencia soviética, que luego fue vendida y transformada en un edificio de pocos pisos y muy buen diseño, algo que parece que se perdió desde entonces. El pasaje, pese a que está enfrente del Alto Palermo, es una isla de silencio y poco tránsito, con lo que sus habitantes se preocupan de que les fuercen una “movida”. Ya hay un bar en la cuadra y todos se ven venir mesas en la vereda, música y manteros incontrolados.