En víspera de la votación en el Senado para convertir en ley el respaldo parlamentario del Programa de Facilidades Extendidas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), legisladores del Frente de Todos se reunieron con el economista belga Eric Toussaint, presidente del Comité para la abolición de las deudas ilegítimas (CADTM). El senador kirchnerista Oscar Parrilli le abrió las puertas de su despacho en la Cámara alta, convocó a algunos senadores y diputados de la coalición de Gobierno y durante una hora intercambiaron opiniones sobre el acuerdo al que arribó el Gobierno con el FMI para cancelar el stand by de 45 mil millones de dólares que le otorgó a Mauricio Macri. La conclusión de Toussaint fue que “Argentina perdió la oportunidad de haber suspendido los pagos y realizar una auditoría sobre los tramos ilegales de la deuda para conseguir una mejor negociación con el FMI”.

Del encuentro en el despacho de Parrilli participaron las diputadas camporistas Claudia Penacca, Gabriela Estévez y Florencia Lampreabe (que la semana pasada votaron en contra del acuerdo), y el diputado Itaí Hagman (de Frente Patria Grande, que se abstuvo); además de los senadores y senadoras oficialistas María Inés Pilatti Vergara (Chaco), Matías Rodríguez (Tierra del Fuego) y Guillermo Snopek (Jujuy), todos ellos también críticos del acuerdo.

La reunión quedó plasmada en una foto que Penacca subió a su cuenta de Twitter. “Junto a senadorxs y diputadxs nos reunimos con el economista y politólogo Belga Eric Toussaint. Se analizaron los principales aspectos del acuerdo con el FMI y antes de finalizar afirmó: "Argentina tiene la oportunidad de suspender los pagos y declarar la deuda odiosa", posteó la diputada.

Aunque el belga sostuvo que Argentina “cometió el error” de no comenzar en 2019 las negociaciones en “otros términos” con el FMI. Consideró que entonces, en el contexto internacional de la pandemia y con la conducción del organismo desprestigiado y debilitado, se podría haber arribado a un acuerdo en mejores condiciones que el que se terminó pactando. Agregó además que si bien el FMI no exigió reformas de fondo, estas pueden aparecer tras cada una de las revisiones trimestrales que durante dos años y medio el organismo realizará para garantizar las pautas que fija el acuerdo.