Culminó este martes la 44° edición de las Olimpíadas de ajedrez, la máxima cita mundial en lo que a combinados nacionales se refiere, que -cada dos años- reúne a las selecciones de ajedrez del mundo y que se desarrolló en la ciudad de Chennai, India.

En el absoluto, la categoría principal de la que participan hombres y mujeres, la sorpresa absoluta fue el título para Uzbekistan, que -fuera de los pronósticos de los especialistas-, preclasificada 14° y sin ningún jugador de súper elite, consiguió 19 puntos sobre 22 posibles, producto de 8 matchs ganados y 3 empatados. 

Uzbekistan superó a Armenia (de gran torneo también, otra sorpresa porque estaba preclasificada 12 y jugaba sin su máxima figura, Levon Aronian, que se cambió de Federación para jugar para Estados Unidos), que culminó con la misma cantidad de puntos pero peor sistema de desempate. 

Atrás quedaron muchos de los grandes candidatos: la siempre peligrosa selección local que (por ser organizadora) pudo presentar 3 combinados y, curiosamente, el segundo mejor terminó en el tercer puesto, arriba del “dream team” estadounidense, que tiene tanto en los 4 titulares como en el suplente -el único jugador nacido en Estados Unidos-un ciento por ciento de jugadores de súper elite y que, siendo la selección mejor preclasificada, terminó en la 5° ubicación.

La más grande decepción del torneo se la llevo, sin dudas, la Noruega de Magnus Carlsen, 3° preclasificada, que culminó en la 59° a pesar de la correcta actuación del Campeón Mundial (7,5 en 9).

En cuanto al combinado de la Argentina, con 14 puntos, terminó en la posición 33, cerca de lo esperado por su preclasificación (30°) y no pudo dar la sorpresa. Se destacó la actuación de Leandro Krysa (7 puntos sobre 9 posibles).

En cuanto al plano latinoamericano, los combinados mejor ubicados fueron Cuba, Brasil y Perú - en los puestos 19, 21 y 24, respectivamente- todos con 11 puntos, pero distinto sistema de desempate.

En el plano individual, la mejor perfomance (¡2898!) fue para el inglés David Howell, y la segunda para la gran sorpresa del certamen, el joven (17 años) Gukesh D, primer tablero del segundo mejor equipo de la India, aunque, a pesar de su tremenda 2867 de performance terminará con un sabor amargo: tuvo el título para su país en sus manos, con una posición ganada que le hubiera permitido derrotar a la selección campeona, pero se equivocó en los apuros de tiempo y cedió el punto entero frente al uzbeco Abdusattorov, otra de las grandes figuras del torneo.

Rusia brilló por su ausencia

Entre los datos curiosos que arrojó la olimpíada de Ajedrez 2022:

  • La ausencia de Rusia, siempre candidato en un certamen de esta categoría, a causa de las sanciones por la guerra y la de China, otra super potencia de ajedrez, aparentemente por su política de Covid cero.
  • La juventud del equipo campeón: tablero por tablero, del 1 al 5°, tenían 17, 20 ,16, 27 y 20 años, respectivamente.
  • Wesley So, jugador de súper elite nacido en Filipinas que representa a Estados Unidos, atrajo la atención de toda la afición al realizar una de las jugadas más bellas del certamen, en la que quizás sea una de las mejores partidas del año. Fue frente al armenio Melkumyan.
  • Sam Shankland, único jugador nacido en Estados Unidos en su combinado nacional, fue protagonista de una situación que normalmente solo puede observarse en un torneo de aficionados: observo mal la jugada de su adversario, tomo una pieza, noto el error pero, a causa de la regla que obliga a mover la pieza que se toca, y no tener esta pieza ninguna jugada no perdedora, debió abandonar su partida en el match frente a Armenia y, con esa derrota, dejar a su país fuera de la lucha por el título.

Entres las mujeres, Argentina terminó 34

En la olimpíada femenina, no hubo batacazo: se consagró el combinado Ucraniano (2° preclasificado), superando a Georgia (2° preclasificada e históricamente potencia en el ajedrez femenino), ambos con 18 puntos, y sacándole un punto de ventaja al local (2° preclasificado).

Argentina culminó en el puesto 34, siendo la 40° preclasificada. La mejor selección latinoamericana fue Cuba (puesto 19) y el mejor rendimiento individual fue para la polaca Oliwia Kiolbasa, seguida por la sueca, y ya legendaria, Pia Cramling, quienes tuvieron performances de 2565 y 2532 respectivamente.