El secretario de economía del Vaticano, el cardenal George Pell, viajó a Australia para presentarse en los tribunales de ese país, donde enfrentará cargos por abuso sexual de menores. El australiano de 76 años, considerado como el número tres en la jerarquía vaticana, deberá comparecer el próximo 26 de julio ante un tribunal de Melbourne. 

Pell está acusado de haber abusado sexualmente de menores cuando era sacerdote de Ballarat, entre 1976 y 1980, y cuando fue arzobispo de Melbourne (1996-2001). El clérigo negó las acusaciones el 30 de junio, en Roma, ante los medios de comunicación, como lo había hecho en octubre de 2016, cuando fue interrogado en la capital italiana por la policía australiana. En febrero de este año, el Senado australiano solicitó a Pell que regresara a su país “para ayudar a la policía y la oficina victoriana de procesamientos públicos en la investigación”. El cardenal se negó al pedido y adujo que era “una injerencia por parte del Senado en el debido proceso de la investigación de la policía de Victoria”.

La justicia australiana no adelantó el “número de quejas” ni la “naturaleza de cargos” que se le imputan. Sin embargo, no es la primera vez que el actual cardenal es acusado de abusos sexuales. En 2002, cuando era arzobispo de Sidney, un hombre aseguró haber sido abusado por él en 1961, cuando él tenía 12 años y Pell estaba formándose para ser sacerdote. En ese caso, las investigaciones exoneraron al cardenal.