El plan de lucha comenzará el próximo jueves con la instalación de 1000 ollas populares, continuará con un acampe en el centro porteño el 27 de julio, una marcha a Plaza de Mayo el 7 de agosto, día de San Cayetano, y culminará el mismo día de la protesta de la CGT.

El Plenario Nacional de Delegados de la CTEP se solidarizó con los trabajadores de PepsiCo y criticó "la arbitraria exclusión de los trabajadores de la economía popular del Consejo del Salario". Además, denunció el "decreto unilateral que aumenta miserablemente el Salario Mínimo Vital y Móvil" firmado por el presidente Mauricio Macri y exigió "frenar la escalada represiva y la persecución contra las organizaciones del pueblo, los trabajadores, los migrantes y la juventud".

Durante la protesta, las tres organizaciones convocantes reclamarán la sanción urgente de una Ley de Emergencia Alimentaria, la plena implementación de la Ley de Emergencia Social, y la "reparación histórica para la agricultura familiar". Asimismo exigirán la "integración urbana con trabajo popular en las 4100 villas y asentamientos" y "el fin del ajuste antipopular y la política de endeudamiento que pone en riesgo la soberanía nacional y a las futuras generaciones".