Fabián “Pepín” Rodríguez Simón cumplió dos años prófugo de la Justicia argentina y se aferra a un fallo de la Corte Suprema de Justicia uruguaya que lo beneficie para evitar ser extraditado. Investigado por el armado de una mesa judicial durante el Gobierno de Mauricio Macri para perseguir y apretar a empresarios, jueces y fiscales, el operador judicial no duda en mostrarse en público: pasa sus días en un exclusivo balneario uruguayo y el fin de semana recibió la visita de sus hijas y sus nietos.

Rodríguez Simón cumplió el 8 de diciembre pasado sus primeros dos años prófugo de la Justicia argentina y nada parece indicar que su situación vaya a cambiar en el corto plazo. El abogado y cerebro jurídico de Macri es investigado por la jueza federal María Servini por el armado de una mesa judicial que presionaba a empresarios, entre ellos a los accionistas del Grupo Indalo, Cristóbal López y Fabián de Sousa; y por la persecución a jueces y fiscales durante el gobierno de Cambiemos.

Sin ir más lejos, el sábado fue señalado por la propia vicepresidenta, que recordó los ataques a la exprocuradora General, Alejandra Gils Carbó, presionada para apartarse del cargo, lo que finalmente ocurrió en 2017. En una carta, Cristina recordó la revelación de Gabriel de Vedia, juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, quien contó públicamente que Pepín le dijo que debía transmitirle a Gils Carbó que, si no quería ir presa junto con sus hijas, debía renunciar.

El martes, tras ser condenada en la causa Vialidad, la vice también había apuntado a Rodríguez Simón, al hacer un repaso por el viaje de los jueces federales, empresarios, fiscales y exespías a Lago Escondido: "(Gils Carbó) había sido designada con amplia mayoría constitucional, fue obligada a renunciar por "Pepín", que no estaba en ese vuelo porque está prófugo desde hace dos años en Uruguay. Yo estoy sentada acá, nunca me fui de mi país, el amarillo qeuorganizaba la mesa judicial, está prófugo".

Un prófugo con vida de lujo

Ahora, “Pepín” pasa sus días prófugo de la Justicia en el exclusivo balneario Manantiales, ubicado a pocos kilómetros del centro de Punta del Este, en una zona de playas anchas, arenas blancas y mar calmo. 

Allí, este fin de semana recibió a sus tres hijas - fruto de su relación con la actual jueza en lo Civil y Comercial de San Isidro, Soledad de Vedia, quien hasta hace poco tiempo predicaba en entrevistas sobre la necesidad de "dar el ejemplo" -, sus dos nietos pequeños y su hermano. Con ellos compartió un almuerzo y se tomó algunas fotografías para el recuerdo familiar, según pudo reconstruir Página/12.

Pepín Rodríguez Simón, a la espera de un guiño de la Corte uruguaya

El futuro de “Pepín” está ahora en manos de la Corte Suprema de Justicia de Uruguay, que debe definir si finalmente le conceden el refugio como asilado político. El también diputado del Parlasur apeló al máximo tribunal charrúa tras dos fallos previos en los que se le fue negada esa condición.

Antes, la Comisión de Refugiados uruguaya había emitido un duro informe donde indicó que no debía ser considerado víctima de una persecución, como argumentaba el abogado.

Unos meses después, la jueza Adriana Chamsarian, también le negó el pedido de asilo político bajo el argumento de que no habían condiciones para “conceder el refugio”. Un fallo de segunda instancia confirmó el fallo.

En un primer momento, “Pepín” había asumido de facto su propia defensa. Ahora, hace pocos meses designó como abogado a Jorge Díaz, exprocurador General uruguayo, según publicó la semana pasada el diario Perfil.

Su presencia en el Parlasur y el pedido de juicio político

A pesar de estar prófugo de la Justicia, “Pepín” Rodríguez Simón no dudó en mostrarse en público en las últimas sesiones del Parlasur. Meses atrás, debió irse del salón donde se llevaba a cabo una sesión, en medio de un fuerte repudio del resto de los parlamentarios argentinos. “Yo tengo derecho de pedir la protección internacional si considero que esta es una imputación política”, se había defendido meses atrás.

Consultada por Página/12, la parlamentaria por el Frente de Todos, Cecilia Britto, explicó que aguardan un nuevo fallo judicial que rechace el pedido de asilo político para volver a impulsar la expulsión. “Estimamos que con tres decisiones jurisdiccionales y la Corte, la oposición se quedará sin argumentos para no votar la expulsión de Pepín”, sostuvo.