Samsung recuperará 157 toneladas de metales preciosos y raros procedentes de los Galaxy Note 7, cuya producción y venta fue suspendida en octubre de 2016 a raíz de las combustiones espontáneas que sufrieron las baterías de algunas unidades del dispositivo. El fabricante coreano señaló en un comunicado que planea reutilizar componentes tales como módulos de cámara, chips y pantallas como piezas de repuesto. Además, recupera metales como cobalto, cobre, oro y plata a partir de componentes no reutilizables. La compañía retiró más de tres millones de Galaxy Note 7 cuando surgieron las primeras quejas en septiembre de 2016 de que las baterías de litio explotaban o se incendiaban durante la recarga. Posteriormente, volvió a lanzar el terminal supuestamente arreglado pero tuvo que dar marcha atrás y suspender definitivamente la producción y distribución del Note 7 el 11 de octubre cuando aparecieron casos de teléfonos de reemplazo que también se incendiaban.