A tan solo una semana de la "mesa política" que convocó el presidente Alberto Fernández, crece la incertidumbre acerca de qué sucederá en el marco de ese encuentro. Los preparativos, aunque a paso lento, avanzan. Cerca del mandatario quieren bajarle el tono a la reunión del PJ y dicen que allí "no se hará magia", que solo se hablará de lo electoral. Desde el kirchnerismo, en tanto, se comienzan a mostrar frustrados porque la idea de ellos era que el temario sea más amplio y que se puedan discutir distintas políticas de gobierno. Más allá de eso, dicen que van a enviar representantes, aunque aclaran que todavía no están definidos. 

El Presidente sigue con su idea de ser pelear la reelección y llevaría esa idea a la mesa. Esta semana se juntó con intendentes, donde volvió a transmitir ese deseo, y también tenía planificado reunirse con gobernadores aunque ese mitin aún está en stand by . Varios gobernadores no creen que haya una reunión con el Jefe de Estado antes de la reunión del jueves. "Nunca se programó tal reunión. No hay nada previsto y no creo que tengamos una reunión previa al encuentro del PJ", dijo a este diario un integrante de peso de la Liga de Gobernadores. Según adelantó, ellos no están trabajando desde ese espacio para llevar a la reunión del jueves una postura unificada. En principio, irán a escuchar. 

"Si la mesa política se convierte en una asamblea pierde el sentido que tiene que tener, que es poder ordenar una estrategia", advirtió un referente que se siente identificado con la vicepresidenta. Además, ese dirigente opinó que "hay que tener cuidado de que no nos den una sobredosis de mesa política porque eso es otra forma de hacer que la mesa política no exista". Dentro del oficialismo son muchos los que consideran que la verdadera "mesa" tiene que ser una "de tres patas" en la que se sienten Fernández, CFK y Sergio Massa y que, como resultado de esa reunión, luego haya otras más amplias. Eso ya no ocurrirá porque la vicepresidenta hizo saber que ella no irá el jueves al PJ y que el diputado Máximo Kirchner, tampoco. 

En el encuentro del jueves, además de hablar de las elecciones, seguramente también se converse sobre la necesidad de poner paños fríos a la interna y que las diferencias se empiecen a limar en el ámbito privado. Así lo adelantó el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, que dijo que "les queremos contar a los militantes que vamos a dirimir nuestras diferencias y que aprendimos de esas peleas que tuvimos”. Sin embargo, por ahora eso no pareciera estar funcionando. En declaraciones radiales con CNN, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, volvió a echar leña al fuego y, enfrentando al kirchnerismo, dijo que, en la mesa política, "la gestión del Presidente ni en pedo hay que discutirla". Luego, agregó que esos planteos "son de mentes afiebradas que sueñan con intentar esmerilar al Presidente". Sus críticas fueron más allá y el titular de Seguridad agregó que "algunos aparecen enojándose y haciendo declaraciones altisonantes y, a mi juicio el Presidente es demasiado tolerante". 

En la reunión con intendentes que hubo el martes en Olivos, Massa habría dicho al mandatario que en el corto plazo tiene que definir si quiere ser candidato o no en las próximas elecciones. Aníbal Fernández, se enteró de esos trascendidos y aclaró que, "si es candidato o no, lo decide el Presidente, ¿desde cuándo alguien le va a decir a él que se tiene que definir?".

Desde los sectores ligados al kirchnerismo, mientras tanto, ignoraron esas declaraciones y dicen que siguen firmes con la idea de realizar un operativo clamor para levantar la proscripción de la vicepresidenta. Por eso siguen trabajando en diversas reuniones para que esa sea una de las consignas del 24 de marzo. El 9 de ese mismo mes se conocerán los fundamentos de la causa vialidad. Ellos creen que ese tema, el de la proscripción de la vicepresidenta, también tiene que ser parte del menú en el encuentro del PJ. Para el cierre de listas, que será el 24 de junio, falta un largo trecho y, en el medio, todo puede suceder.