Nueva posta de un recorrido que ya acumula nueve paradas y que se ha desarrollado a lo largo de 47 años, sumando los seis episodios de la saga que tiene al boxeador Rocky Balboa como protagonista y los tres de Creed, un spin off subsidiario de aquella otra, Creed III representa un aporte de valor a este universo creado por Sylvester Stallone en 1976, a partir de un guión propio al que él mismo le puso el cuerpo, interpretando a su protagonista. Hasta ahora, porque esta tercera parte de la saga centrada en la figura de Adonis, el hijo de Apollo Creed, gran rival y mejor amigo del famoso “Semental Italiano”, ya no cuenta con la presencia del popular personaje, a partir de un conflicto de intereses que Ezequiel Boetti explicó con lujo de detalles en este mismo espacio. No hay Rocky en Creed III y habrá que ver si eventualmente las partes resuelven sus conflictos, para que el personaje vuelva a aparecer en pantalla en el futuro.

Más allá de esos detalles, Creed III logra construir una historia sólida, con una lógica y una dinámica bastante independiente, sin necesidad de colocar a Rocky en un lugar destacado de su narrativa. Ni en un lugar destacado ni en ninguna parte, porque el personaje solo aparece en una fotografía durante unos pocos fotogramas y se lo menciona una vez, en una cita inevitable que funciona como hipervínculo con detalles que son esenciales dentro de este universo con muchísimas reglas propias.

Por ejemplo, se puede poner en paralelo esta tercera parte de Creed con la tercera de Rocky y ver que algunos de los conflictos que aquejaron al mentor se repiten ahora en el pupilo. En aquella, Rocky debía pelear contra su propio aburguesamiento para enfrentar a Kluber Lang, interpretado por el recordado Mister T, un boxeador con esa voracidad de éxito que solo tiene el que nace en la miseria. Algo que al protagonista se le había perdido entre las mansiones y los autos de lujo. De manera similar, Adonis se reencuentra con un amigo de la infancia, un promisorio boxeador amateur que ha pasado 18 años preso y que ahora regresa para pedirle que lo ayude a concretar aquel sueño de gloria que se esfumó tras las rejas. Pero el pasado meterá la cola entre los dos amigos y lo que comenzó como la reconstrucción de una amistad perdida terminará convertido en rivalidad. Un poco a la inversa de lo que pasaba en el vínculo entre Rocky y Apollo.

Creed III es también el debut como director de Michael B. Jordan, el encargado de interpretar en las tres películas a Adonis, el protagonista, el hijo de un mito que también logra convertirse en leyenda. Debe decirse que el hasta ahora actor consigue pasar la prueba de forma digna, exhibiendo algunas ideas interesantes de puesta en escena. Puede mencionarse a modo de ejemplo una larga secuencia dentro de la pelea final, que transcurre en un ring alegórico y realiza un buen aporte a la representación del boxeo no solo en su faceta física, sino también en el terreno de lo mental. La película también resulta muy solvente en las coreografías de lucha, donde el nivel de realismo llega a ser superlativo. Al punto de que tal vez sea la más verosímil en ese terreno no solo dentro de la saga, sino de todas las que han representado cinematográficamente al boxeo, que no son pocas y muchas son muy buenas.

También es cierto que Creed III no se aparta de la lógica interna de la saga, que repite una estructura dramática que ya es bien conocida y que no realiza aportes sustanciales en ese terreno. Pero ese no es un problema per se, ni en este ni en ningún caso. Como ha dicho alguna vez Jorge Luis Borges (palabras más, palabras menos), los argumentos no son lo más importante de un relato, porque las historias que pueden contarse no son tantas. Ahí está el talento del buen narrador, en su capacidad para contar de nuevo la misma historia, haciéndole creer a su público que la está leyendo, escuchando o viendo por primera vez. Y de algún modo, Creed III logra ser, de nuevo, esa primera vez.

Creed III - 7 puntos

Creed III, Estados Unidos, 2023

Dirección: Michael B. Jordan

Guión: Keenan Coogler, Ryan Coogler y Michael B. Jordan

Duración: 116 minutos

Intérpretes: Michael B. Jordan, Tessa Thompson, Jonathan Majors, Wood Harris, Phylicia Rashad, Mila Davis-Kent, José Benavidez.

Estreno en salas.