El JP Morgan compró el First Republic Bank, una de las instituciones que había quedado muy golpeada en Estados Unidos, luego de la quiebra del Silicon Valley Bank. Como parte de la transacción, las 84 oficinas de First Republic Bank en ocho estados reabrirán desde el inicio de esta semana como nuevas sucursales de JP Morgan Chase, en horario comercial.

En detalle, se informó que el Departamento de Protección e Innovación Financiera de California informó este lunes que cerró el First Republic Bank y nombró a la Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC) administrador judicial de la entidad.

La FDIC comunicó que, para proteger a los depositantes, firmó un acuerdo de compra y asunción con JP Morgan Chase Bank, para asumir todos los depósitos y la totalidad de los activos de First Republic Bank. "Todos los depositantes de First Republic Bank se convertirán en depositantes de JP Morgan Chase Bank, National Association, y tendrán pleno acceso a todos sus depósitos", se mencionó en un comunicado.

Los depósitos seguirán estando asegurados por la FDIC, y los clientes no necesitan cambiar su relación bancaria para mantener su cobertura de seguro de depósitos hasta los límites aplicables, precisa el comunicado.

Los clientes de First Republic Bank deben seguir utilizando su sucursal actual hasta que reciban la notificación de JP Morgan Chase Bank de que ha completado los cambios en los sistemas para permitir que otras sucursales de JP Morgan procesen también sus cuentas, explica.

La crisis del First Republic Bank

El acuerdo con JP Morgan se ha producido tras la subasta de emergencia impulsada por el Gobierno que ha tenido lugar este fin de semana, en la que las autoridades pidieron a bancos como JP Morgan, PNC Financial Services y Citizens Financial que presentaran ofertas. También se invitó a Bank of America y US Bancorp, pero ambos decidieron no participar.

La quiebra del Silicon Valley Bank el 10 de marzo acabó finalmente con First Republic, después de asustar a sus clientes, que han ido retirando progresivamente sus depósitos.

La entidad regional se hundió la semana pasada en bolsa tras anunciar sus resultados del primer trimestre y comunicar salidas de depósitos por valor de más de 100.000 millones de dólares. El martes perdió un 50 por ciento, el miércoles, un 30 por ciento, el jueves logró rebotar un 8 por ciento y el viernes volvió a desplomarse un 43 por ciento. Con todo, las acciones de First Republic habían perdido más del 90 por ciento de su valor desde principios de marzo.