San Lorenzo empató 0-0 con Palestino de Chile y pende de un hilo su clasificación al repechaje para avanzar a los octavos de final de la Copa Sudamericana. El equipo azulgrana es tercero en el Grupo H. Si bien fue más en el encuentro jugado en el estadio Nuevo Gasómetro, no pudo quebrar la defensa chilena y hasta pudo haber perdido el partido por alguna desatención.

El local tomó la iniciativa y jugó en el campo del equipo trasandino, pero en la primera media no pudo tener chances concretas. Apenas ofreció un remate desde afuera del área de Nahuel Barrios

En tanto que a Gonzalo Maroni le costó convertirse en el conductor del equipo dirigido por Rubén Darío Insúa.

Pero Palestino empezó a salir y encontró espacios para arrimarse al área local. El visitante generó peligro y la más clara la tuvo con un remate de Fernando Cornejo, que llegó a desviar Batalla con lo justo, ya que la pelota dio en el palo.

En el complemento, San Lorenzo fue una tromba por la banda izquierda con un repertorio de centros que no llegaron a ser conectados en el área. El equipo de Insúa jugó en el campo de Palestino, que le costó salir.

A falta de 20 minutos, San Lorenzo volvió a amenazar con Agustín Martegani que sorprendió dentro del área, remató, pero el arquero Rigamonti le ahogó el grito.

A los 83 minutos hubo una contra para Palestino y Jonathan Benítez corrió y quedaba solo con Batalla. Ahí Ezequiel Cerutti lo corrió, lo llegó a tomar de la camiseta y lo empujó afuera del área, y el chileno cayó adentro. La jugada fue analizada por el VAR y San Lorenzo se salvó del penal, pero Cerutti se fue expulsado.

San Lorenzo suma cinco puntos y una diferencia de gol de -2, mientras que Palestino, dirigido por el argentino Pablo Sánchez, tiene 8 unidades y +1 en goles. De esa manera, el equipo de Boedo necesita una victoria, de mínimo, para continuar con chances concretas de terminar segundo en su zona, por detrás de Fortaleza de Brasil (12) y así enfrentarse a los terceros de la Libertadores en el repechaje previo a los octavos de final.

Los dirigidos por Rubén Darío Insúa venían de empatar sin goles con Colón y siguen con problemas de sequía en el arco rival.