Mediante juicio abreviado, el exintendente de Angastaco Eduardo Ramón Díaz fue condenado por el delito de peculado en calidad de autor, mientras que su esposa, la agente sanitaria Alicia Elvira Ríos, también fue condenada, en su caso como partícipe necesaria del peculado y como autora del delito de falsificación de instrumento público. La condena es por irregularidades en la administración de la Hostería municipal de Angastaco. 

En el juicio, tras la admisión de culpabilidad, Díaz fue condenado a tres años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación absoluta perpetua y Ríos recibió una pena de dos años y tres meses de prisión, también de ejecución condicional. En ambos casos se les aplicaron reglas de conducta en ambos casos.

Además, como parte del acuerdo alcanzado con la Fiscalía, representada por la fiscala de la Unidad de delitos Económicos Complejos (UDEC) Ana Inés Salinas Odorisio, el exintendente y ex diputado provincial y su esposa deberán reparar el daño ocasionado al municipio, depositando ayer mismo $1.000.000. El perjuicio auditado por la UDEC fue de $141.412,74 en 2018.

Esta causa se inició por una denuncia penal presentada el 6 de junio de 2020 por la Auditoría General de la Provincia, que dio cuenta de irregularidades del manejo de los fondos del municipio de Angastaco por parte de Díaz, que dejaba este cargo. En el relevamiento de información para la transición institucional en la Municipalidad de Angastaco, el organismo detectó que la Hostería municipal era administrada desde diciembre de 2017 por la esposa del ex intendente sin contrato de concesión, y el responsable de cobranzas del establecimiento no estaba registrado. Además, Ríos, que había sido designada secretaria de Acción Social, utilizaba su cuenta personal de Mercado Pago para acreditar las cobranzas de tarjetas de crédito correspondientes a reservas efectuadas por los huéspedes mediante la página de Booking.

En la investigación la Unidad de Investigaciones de Delitos Económicos Complejos obtuvo pruebas de lo denunciado por la Auditoría General. Luego del análisis de datos y estas pruebas investigadores del Gabinete de Delitos Económicos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) confirmaron que Alicia Ríos recibió pagos por los servicios de hospedaje en la Hostería en efectivo, directamente de los huéspedes que se alojaban en el lugar y a través de tarjetas de crédito utilizando una cuenta de Mercado Pago a su nombre. No se encontraron pruebas que indiquen que estos fondos hayan sido rendidos a la Municipalidad.

La fiscalía destacó que el entonces intendente de Angastaco era responsable de la administración de la Hostería, incluyendo los gastos y la recaudación de los ingresos derivados de los servicios de restaurante y hospedaje, y designó a su esposa como encargada, sin seguir los procedimientos administrativos necesarios. Además, según las declaraciones de Ríos ante las autoridades de la Auditoría, ella se encargaba de administrar y recibir los ingresos generados por la explotación de la Hostería. Por todo esto la fiscala Salinas Odorisio acusó a Díaz por peculado y a su esposa como partícipe necesaria.

La fiscala también acusó a Ríos por falsificación de instrumento público. En su defensa, la mujer había presentado la resolución 33/18 bis como prueba de su designación como encargada de la Hostería. Sin embargo, la Municipalidad de Angastaco informó la inexistencia de tal registro en el Libro de Actas de Resoluciones.