A poco más de dos semanas de la conquista del Mundial femenino, el entrenador del seleccionado español, Jorge Vilda, fue cesanteado de su cargo, una medida que se enmarca en el escándalo protagonizado por el dirigente Luis Rubiales. El volantazo de la Federación española es total ya que en su lugar designó a Montse Tomé, segunda entrenadora del equipo campeón y primera mujer en la historia española en hacerse cargo de la Selección Mayor.

Tomé, exvolante del Barcelona y España y quien también venía dirigiendo a la Sub 23, tiene la aprobación de la mayoría de las jugadoras campeonas del mundo y su nombramiento encaminaría el regreso de las mismas a la Selección tras la renuncia masiva que presentaron en reclamo de la destitución de la dirigencia encabezada por Rubiales.

"La Real Federación Española de Fútbol, en una de las primeras medidas de renovación anunciadas por el presidente Pedro Rocha, ha decidido prescindir de los servicios de Jorge Vilda como director deportivo y seleccionador nacional femenino, cargo, este último, al que accedió en 2015", comunicó la RFEF de manera oficial.

Rocha está en el cargo por al menos tres meses, debido a la suspensión de la FIFA contra Luis Rubiales -besó sin consentimiento a la jugadora Jenni Hermoso en la celebración mundialista- y determinó la interrupción del ciclo Vilda en favor de Tomé, quien venía dirigiendo también a la Sub 23 femenina.

Vilda, de 42 años, había asumido en 2015 aunque tuvo conflictos con el plantel que estallaron en la Eurocopa de Inglaterra 2022. Después de perder en cuartos de final contra las inglesas, se reavivó un malestar por el que renunciaron 15 jugadoras, entre ellas Aitana Bonmatí, quien volvió este año para ser la MVP del Mundial ganado por España.

El entrenador sumó muchos críticas después del triunfo mundialista, cuando aplaudió a Rubiales durante el polémico discurso en el cual el dirigente afirmó que no renunciaría y explicó que el beso con Hermoso había sido "consentido y mutuo".

En esa misma asamblea, Rubiales le dedicó palabras de cariño a Vilda e incluso anunció que iniciaba la negociación para la continuidad del DT por "cuatro años y cobrando medio millón de euros al año", algo que aparentemente Vilda no sabía. La cosa, evidentemente, no llegó a buen puerto.

Las disculpas de la RFEF

La jornada de este martes ya había arrancado con protagonismo de la RFEF dado que, con una carta firmada por Rocha, expresó sus "más sinceras disculpas" por el "comportamiento totalmente inaceptable" de Rubiales el pasado 20 de agosto.

"El daño causado al fútbol español, al deporte español, a la sociedad española y al conjunto de los valores del fútbol y del deporte ha sido enorme. Nos sentimos profundamente apenados por el daño causado y por ello, desde esta RFEF debemos pedir las más sinceras disculpas y adquirir un compromiso firme y absoluto de que hechos como estos no puedan volver a suceder nunca más", promete el comunicado de la Federación.

En cuanto a Rubiales específicamente, la RFEF sentenció: "Lamentamos el comportamiento totalmente inaceptable del máximo representante institucional durante la final y en los momentos posteriores".

"Su actuación debe achacarse única y exclusivamente a él, puesto que es el único responsable de sus actuaciones ante la sociedad, ante los órganos deportivos y, si es el caso, ante la justicia", añade el escrito, donde además se asegura que se está realizando una investigación "exhaustiva de los hechos".