Los precios del petróleo volvieron a subir este viernes, impulsados por el bajo nivel de los inventarios de crudo estadounidense, que contribuyen a tensar el mercado, preocupado ya por la escasez de oferta.

El barril de petróleo Brent para entrega en noviembre subió 0,81 por ciento y cerró a 90,65 dólares; su precio de cierre más alto desde mediados de noviembre; y el barril West Texas Intermediate (WTI) estadounidense para entrega en octubre ganó 0,73 por ciento a 87,51 dólares.

Tras una sesión de consolidación, con cierta recogida de beneficios, los precios del petróleo subieron impulsados por el informe de la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA), publicado el jueves.

El documento mostraba que los inventarios comerciales de crudo habían caído en 6,3 millones de barriles, mucho más de lo esperado, mientras que los analistas esperaban un tercio, indicó la agencia de noticias AFP.

Las reservas estadounidenses están ahora en su nivel más bajo desde principios de diciembre; y no habían estado tan bajas en esta época del año desde hacía cinco años. En tanto, los inventarios de gasolina estadounidenses también se situaron en un modesto nivel, el más bajo registrado desde noviembre.