El 4 de octubre se cumplieron 17 años de la sanción de la Ley 26.150 de Educación Sexual Integral (ESI), que reconoce el derecho de niñas, niños, adolescentes, jóvenes y personas adultas a recibir educación sexual integral en todos los establecimientos educativos del país, de todos los niveles, modalidades y tipos de gestión.

La propuesta pedagógica de la ESI aborda los conceptos de manera transversal y en espacios específicos. Incluye el desarrollo de saberes y habilidades sobre los cinco ejes conceptuales en los que se trabaja: el cuidado del propio cuerpo; la valoración de las emociones y de los sentimientos en las relaciones interpersonales; el reconocimiento de la perspectiva de género; el respeto de la diversidad; y el ejercicio de los derechos concernientes a la sexualidad. Además, promueve el trabajo articulado con centros de salud, organizaciones sociales y familias.

Claudia Cabrera es docente y forma parte del equipo ESI del Ministerio de Educación de La Rioja desde 2012. Es referente de la Dirección de Nivel Primario y además forma parte, en representación de la cartera, del dispositivo ENIA.

A 17 años de la sanción e implementación de la ley, Cabrera afirmó a La Rioja/12 que se avanzó, que todavía quedan pendientes y que la normativa ha favorecido la ampliación de derechos con la sanción de otras leyes. La Rioja cuenta por ejemplo con la ley de Atención de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas o Testigos de Maltrato, Abuso Sexual Infantil, aprobada en 2016 y la ley de Bullying sancionada en este año.

En el caso del protocolo de vulneración de derechos surgió de un trabajo Intersectorial y el protocolo de bullyng fue impulsado desde la Secretaria de Planeamiento y que involucra a la ESI como herramienta pedagógica tanto en la anticipación, como en la intervención y posterior a ella.

“El objetivo es garantizar los contenidos desde un enfoque integral, consideró la referente que resaltó que  la ESI “es un derecho de chicas y chicos. Las barreras siempre las vamos a encontrar en los adultos porque hay un posicionamiento ideológico conservador”, dijo a este diario al ser consultado sobre los desafíos que tiene su implementación efectiva.

Para avanzar en la implementación Cabrera consideró que es fundamental “fortalecer espacios de acuerdo en un intercambio genuino” con relación al vínculo con la familia. “Hay que habilitar la palabra y preguntar qué les pasa con la educación sexual integral porque para muchas familias sigue siendo un tabú hablar. Hay posicionamientos muy rígidos; y es necesario comprender que con esta ley lo que se dan son herramientas para poder enfrentar la vida”, expresó. Agregó en este sentido que, permite identificar situaciones de abusos y maltrato; adoptar juicios críticos, desnaturalizar situaciones de vulneración de derechos de niñas, niños y adolescentes y pedir ayuda.

“La ESI se construye con el diálogo y al consenso, nos invita desde una propuesta integral a tener una nueva mirada sobre la sexualidad que se construyó sobre el silencio”, consideró la referente para desarticular los discursos que la plantean como una ideología de género.

Respecto del Plan Nacional de Prevención del Embarazo No Intencional en la Adolescencia (ENIA), que llevan adelante el l Ministerio de Salud, Educación y el Ministerio de Desarrollo Social, aseguró que desde el 2018, La Rioja bajó 7 puntos en relación con los embarazos no intencionales y destacó que en la pandemia hubo un aumento de los abusos sexuales.

Por medio de este programa, explicó, se brinda información sobre derechos sexuales y reproductivos y no reproductivos en la adolescencia, salud sexual y reproductiva y métodos anticonceptivos en forma gratuita en los servicios de salud, políticas para la prevención del abuso, la violencia sexual y el acceso a la interrupción del embarazo según el marco normativo vigente (IVE – ILE).

“Los chicos tiene información, pero no formación y por eso es importante que puedan tomar conciencia cuales el medio más apropiado para acceder a la información y acudan a las consejerías y puedan conocer bien el uso de los métodos anticonceptivos”, consideró.

Respecto de la perspectiva de diversidad sostuvo que es importante que se reconozca y se respete las identidades y la orientación sexual.