La reciente anulación por parte del Tribunal Supremo de Israel de una ley clave de la reforma judicial que impulsa el gobierno provocó críticas de ministros y aplausos de opositores, despertando la posibilidad de una nueva polarización del país en plena guerra contra Hamas. El ministro de Justicia Yariv Levin, considerado el arquitecto de la reforma, criticó al tribunal y advirtió sobre nuevas tentativas para que la iniciativa sea aprobada.

El Supremo demostró "lo opuesto al espíritu de unidad que se requiere en estos días para el éxito de nuestros soldados en el frente", dijo Levin en su declaración de respuesta al tribunal. El fallo imposibilita "la toma de cualquier decisión en la Knesset (Parlamento) o en el gobierno sin el acuerdo del Tribunal Supremo, privando a millones de ciudadanos de su voz", agregó el titular de la cartera judicial.

El partido derechista Likud del primer ministro Benjamín Netanyahu (foto) consideró "desafortunado" que el Supremo emitiera un fallo tan polémico mientras los soldados israelíes libran combates en Gaza. Por su parte el exprimer ministro Yair Lapid estimó que el tribunal "cumplió fielmente su papel de proteger a los ciudadanos de Israel" y dijo que el fallo "pone fin a un año difícil de lucha que nos desgarró desde dentro".

Por una ajustada mayoría de ocho de 15 jueces, el Tribunal Supremo anuló el lunes una ley clave de la reforma judicial que el gobierno aprobó en julio y que quitó poder a la propia corte para revisar y revocar decisiones gubernamentales en función de si éstas eran razonables o no. El tribunal argumentó que la legislación "causa un daño grave y sin precedentes a las características fundamentales de Israel como Estado democrático". 

Se trata de la primera vez en la historia de Israel que el Supremo intercede ante una enmienda de una ley básica. Desde que la reforma fue anunciada en enero del año pasado, un histórico movimiento de protesta antigobierno realizó multitudinarias manifestaciones cada semana, que no pararon hasta que estalló la guerra entre Israel y Hamas el 7 de octubre.