Mientras que trabaja para recuperarse del impacto generado por el temporal que azoto la ciudad sobre finales del año pasado, el gobierno de Bahía Blanca decidió subir el gasto social un 324 por ciento para el 2024. Así se desprende del Presupuesto municipal aprobado esta semana que contó con los votos positivos de todos los sectores del mapa político bahiense.
Con la hoja de ruta original modificado por los daños ocasionados por la tormenta del sábado 16 de diciembre, la gestión de Federico Susbielles proyectó una ley en la que se priorizaron los trabajos para recuperar la ciudad, principalmente a partir de una importante inversión en obra pública y en políticas sociales destinada a ayudar a las familias damnificadas.
La votación fue acompañada por los ocho representantes que responden al oficialismo que se impuso en las elecciones de octubre y también recibió el respaldo de nueve de los diez concejales de Juntos por el Cambio, donde hubo una banca extraordinariamente vacía.
El Presupuesto incluso tuvo recibió el visto bueno de dos de los cuatro libertarios que se ingresaron en diciembre al Concejo y que desde entonces dividen sus posiciones disputando el liderazgo del espacio del presidente Javier Milei en la novena ciudad más poblada de la República Argentina.
Los dos votos restantes del bloque que responde al oficialismo nacional fueron negativos, entre ellos el de Marité Gonard, la presidenta del cuerpo, que se sumaron a los dos de Avanza Libertad, el espacio de responde a José Luis Espert.
El Cálculo de Recursos para la Administración Municipal asciende a 109.624.047.091,26 pesos, de los cuales se desprende una importante asignación de fondos al sistema de salud municipal. En detalle, 21.882.189.400 pesos serán destinados al Hospital Municipal, 4.450.140.578,84 para la Dirección de la Obra Social del Personal Municipal, y 2.168.059.450 para el Servicio Integrado de Emergencias Prehospitalarias.
Cambio de prioridades
Luego de ocho años, y tras la decisión de Héctor Gay de no presentarse a la reelección, Susbielles le devolvió la intendencia de Bahía Blanca al peronismo. Se hizo con casi 56.700 votos, luego de una campaña que logró sumar más de 15 mil adhesiones respecto a lo que había obtenido en las primarias de agosto.
Su plan original de gobierno se basaba en su experiencia previa al frente de la administración del puerto y estaba enfocado en un desarrollo productivo con foco en el desarrollo tecnológico y la creación de nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, todo cambio el 16 de diciembre, cuando todavía no hacía una semana que había tomado el mando municipal.
El violento temporal generó destrozos que incluyó un derrumbe en el club Bahiense del Norte que dejó un saldo de 13 muertos y una quincena de heridos. También volaron árboles, techos y postes de luz que generaron una mega corte de energía que también complicó la situación en casas y comercios.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires y todos los ministerios activaron sus equipos de emergencia que se pusieron a disposición y brindaron su ayuda desde el primer momento y, por pedido expreso del intendente, el sector privado se sumó con la creación de un fondo específico 9.237 millones de pesos, que se destinaron a la compra de 320 toneladas de chapas y a la construcción de diversas obras, que estarán a cargo de las empresas y que se llevarán a cabo de manera articulada con el municipio.
Según detalló en su momento Susbielles, el plan de reconstrucción viene accionando sobre cinco ejes: Refacción de viviendas, reforestación, reconstrucción de las instituciones deportivas, civiles y culturales, reacondicionamiento de instituciones escolares y cobertura de la seguridad alimentaria.
En ese tren de trabajo colectivo que marca el rumbo de las horas en Bahía Blanca, el Concejo Deliberante sumó su granito de arena aprobando el Presupuesto casi por unanimidad, y dejando de lado las diferencias partidarias para dotar a la gestión municipal de una herramienta fundamental para avanzar en la reconstrucción de la ciudad.
