Tal como lo había advertido a mediados de esta semana, el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, elevó un reclamo formal al ministro de Economía de la Nación, Luis “Toto” Caputo, por el pago de sumas no abonadas durante el último trimestre y su respectiva actualización conforme inflación. Se trata de más de 15 mil millones de pesos que retiene la administración nacional y que la Provincia sostiene que le corresponden.

El reclamo se hizo efectivo a través de una carta emitida por el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, y solicita formalmente al Gobierno nacional el pago de sumas adeudadas, que afectan "la educación, salud y seguridad de los bonaerenses".

Específicamente, el gobierno provincial pide por "la regularización de las transferencias acordadas en el Consenso Fiscal 2017", lo cual incluye "la correcta actualización de las sumas correspondientes al año 2024, ya que ha habido una decisión deliberada de licuarla al aplicar una actualización muy por debajo de la inflación proyectada" y "la cancelación de la deuda que se generó en 2023 por la diferencia entre la inflación efectiva y la proyectada dado que el año terminó con una inflación de 211 por ciento".

También se reclamó el "pago de las sumas no abonadas y su correspondiente actualización, de lo pactado en el Convenio complementario a las compensaciones del Consenso Fiscal 2017, firmado el 19 de julio de 2023” que se ejecuta regularmente desde octubre de 2019; y se advirtió que "estas dilaciones y licuaciones atentan contra el espíritu del Consenso Fiscal 2017 y los compromisos que el Gobierno Nacional asumió, que de esta manera está incumpliendo".

El escrito exigió, además, "el inmediato pago del saldo adeudado por noviembre y diciembre de 2023 y enero de 2024, relativo al Fondo para el Fortalecimiento Fiscal de la provincia de Buenos Aires", al resaltar que "la regularización de estos pagos es fundamental para el normal funcionamiento de la gestión pública provincial".

“Una obligación del Estado nacional”

La provincia de Buenos Aires insistió en que "el envío de estos recursos resulta de obligatoria ejecución para el Estado nacional", y que "los mismos tienen destinos habituales y específicos orientados a financiar diferentes partidas presupuestarias de nuestra provincia, algunas vinculadas a la educación, salud, seguridad de las y los bonaerenses".

"No se trata de los únicos incumplimientos y retrasos que el Gobierno Nacional mantiene con nuestra Provincia, y seguiremos avanzando en el reclamo de cada uno de ellos, así como exigimos la inmediata normalización del Fondo de Incentivo Docente y el Fondo Compensador del Interior, en materia de transporte", reclamó la carta de las autoridades bonaerenses.

Coparticipación

La misiva también planteó la necesidad de rediscutir la Ley de Coparticipación, al entender que hoy "la provincia de Buenos Aires es discriminada y castigada desde hace décadas en el reparto de los recursos necesarios para cumplir con estas obligaciones de forma suficiente y adecuada".

"Más allá de la urgente necesidad de rediscutir una nueva Ley de Coparticipación, el cumplimiento en tiempo y forma del envío de los recursos no automáticos que el Estado nacional le adeuda a la provincia de Buenos Aires resulta crítico para poder garantizar de manera efectiva los derechos fundamentales que la Constitución nacional les reconoce a las y los bonaerenses", añadió la nota enviada por López.

El reclamo

Días atrás, en un acto en la ciudad de Pehuen Có, Kicillof se refirió al retraso en el envío de fondos por parte de la Nación y advirtió que "la provincia de Buenos Aires comenzará a reclamar por vía administrativa todos los recursos que corta el Gobierno nacional". "Seguiremos todas las instancias necesarias porque no son políticas arbitrarias, sino el resultado de leyes y acuerdos que tienen un andamiaje jurídico", dijo entonces. 

"Decían que si no se aprobaba la ley ómnibus iban a buscar fundir a los gobernadores. Después del error que cometieron y volvió el tratamiento a foja cero, cortaron las partidas destinadas al transporte y la educación en todas las provincias", sostuvo y agregó que esta medida "no es un castigo para los gobernadores, sino un ajuste que ya pesa sobre toda la sociedad en su conjunto".

En esa línea, Kicillof anticipó que reclamará "por estos fondos y a acompañar a todos los perjudicados por esta decisión política y arbitraria del Gobierno nacional"

"No apuntan a fundir a un gobierno, apuntan a meterle la mano en el bolsillo a los docentes y a las familias que usan el transporte público en el interior de la provincia y el resto del país porque están ajustando a las familias bonaerenses; no a este Gobierno, ni a este gobernador", resaltó el mandatario. 

Como ejemplo, desde el gobierno bonaerense se detalló que actualmente la Nación adeuda por el Fondo de Incentivo Docente (FONID) la suma de 14.500 millones de pesos; en tanto que por el Fondo Compensador para el Transpporte del Interior unos 900 millones de pesos.

Caída

Con esa realidad como telón de fondo, Kicillof continuó con su agenda oficial y este viernes visitó la planta de Toyota en Zárate donde advirtió que después de un año récord para la industria automotriz en el país, la preocupación crece en el sector por la caída de casi un 50 por ciento de las ventas durante el mes de enero.

"Después de un año récord para la industria automotriz en nuestro país, vemos con preocupación la caída de casi un 50 por ciento de las ventas en enero: menos producción industrial implica menos trabajo, menos exportaciones y menos posibilidades de desarrollo", aseguró el gobernador.

En esa línea, sostuvo que "no es una discusión teórica, tiene consecuencias materiales y visibles en la provincia de Buenos Aires, donde se radica el 56 por ciento de los empleos de la industria automotriz y se produjeron el año pasado el 64 por ciento de los vehículos nacionales".

"Sabemos que hay quienes añoran una etapa en la que solo se producían materias primas, pero ese no es nuestro modelo: nosotros creemos en agregar valor a los bienes primarios y, al mismo tiempo, fortalecer y cuidar a la industria", agregó.

El desarrollo automotriz bonaerense

Acompañado por el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Augusto Costa; el embajador de Japón, Yamauchi Hiroshi; el presidente de Toyota Argentina, Gustavo Salinas; el CEO de la empresa para América Latina y el Caribe, Masahiro Inoue; el jefe de Ingeniería de Hiace, Hideki Mizuma; y el intendente local, Marcelo Matzkin; Kicillof recorrió las instalaciones donde la empresa Toyota comenzó a producir el utilitario Hiace, y destacó la importancia de la planta para el desarrollo del modelo industrial para la provincia de Buenos Aires.

La planta requirió una inversión de 50 millones de dólares. Allí, Toyota volverá a producir un nuevo modelo en el país después de 26 años. Se trata del utilitario Hiace en sus versiones Furgón L2H2 y Commuter (pasajeros), los cuales estarán destinados al mercado doméstico y de exportación a Brasil como punto de partida para evaluar otros destinos en la región.

Este proyecto generará entre 200 y 500 puestos de trabajo. En una primera etapa, el volumen de producción será de 4 mil unidades, en tanto que la nave cuenta con un potencial para fabricar 10 mil utilitarios anuales a mediano plazo.

La planta compartirá autopartes y componentes con los dos vehículos que ya se producen en Zárate y se exportan a 22 países de América Latina: la pickup Hilux y el SUV SW4.