El Servicio Penitenciario Federal (SPF) confirmó que el exministro de Planificación Federal, Julio De Vido, será trasladado desde el penal de Ezeiza a Marcos Paz, donde cumplirá con la prisión preventiva dispuesta en el marco de las causas en las que se lo investiga por fondos no ejecutados en el plan de reactivación de la mina de carbón de Río Turbio y por sobreprecios en la importación de gas licuado. Los jueces federales Luis Rodríguez y Claudio Bonadio cursaron los pedidos de prisión preventiva a pesar de no existir argumentos fundados de fuga o entorpecimiento de la causa.  

El SPF precisó que De Vido "no reúne criterio de internación en el Hospital Penitenciario Central", ubicado en el penal de Ezeiza, lo que lo habilita su pedido de traslado a Marcos Paz. El exministro estuvo bajo revisión médica por ser dependiente de insulina, que tras el traslado podrá aplicarse de forma personal. Los defensores Maximiliano Rusconi y Fabián Améndola ya habían pedido el traslado del exministro a Marcos Paz con el argumento de que allí podrá realizar caminatas, algo necesario para controlar su diabetes.

De Vido fue detenido hace diez días en medio de un inmenso operativo de la Gendarmería y la Policía de la Ciudad, que llegó hasta la casa del exministro en el barrio de Retiro, cuando él, tras conocer la aprobación del desafuero en la Cámara de Diputados, ya se había entregado en los tribunales de Comodoro Py. 

En la causa en la que se lo investiga por los fondos nunca ejecutados de los convenios rubricados entre el Yacimientos Carboníferos Fiscales (YCF) y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) para realizar los estudios para la reactivación de la mina de Río Turbio, De Vido ni siquiera había sido indagado antes de recibir el pedido detención por parte del fiscal Carlos Stornelli, que fue rechazado en primera instancia por el juez Rodríguez y luego ordenado por la Cámara de alzada. 

El fiscal nunca explicó con claridad el pedido de prisión preventiva, o sea, en qué consistía el poder del ministro para entorpecer la causa y menos cómo obstruiría una causa empezada hace dos años. Incluso, dos días antes de su detención, De Vido pidió licencia como diputado y renunció como presidente de la Comisión de Energía de Diputados, únicos cargos que ocupa con poder político. 

En tanto, el pedido de detención hecho por Bonadio se sostiene en la acusación formulada en base al dictamen de un solo perito, David Cohen, quien calculo los sobreprecios de las licitaciones de gas licuado en cifras superiores al 40 por ciento, pero cuyo dictamen fue cuestionado por el otro perito oficial. Cohen había copiado parte de su texto del sitio web El Rincón del Vago.